Los cuatro sospechosos fueron detenidos la semana pasada por su supuesta implicación en la planificación y ejecución de los atentados terroristas perpetrados la semana pasada en Barcelona y en la localidad turística de Cambrils.
Mohamed Houli Chemlal, de 21 años, único sobreviviente de una explosión que destruyó una casa en Alcanar, al sur de Barcelona, donde la policía cree que se preparaban explosivos para un ataque aún más grande a la ciudad, fue el primero en prestar declaración ante el juez Fernando Andreu, en Madrid. En la vivienda se hallaron un centenar de tanques de gas butano y materiales para la fabricación del explosivo TATP.
Se considera que la declaración de Chemlal es crucial para comprender las motivaciones de la célula, luego de que el Estado Islámico se atribuyera la responsabilidad de los ataques.
Mohamed Houli Chemlal. Foto: AFP
El magistrado decidirá si pasan a prisión preventiva o quedan en libertad, con o sin restricciones.
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Por su parte, una vocera de la fiscalía dijo que los cuatro serán interrogados a lo largo del día en presencia de abogados de oficio. Las declaraciones serán en español sin intérpretes, dijo la vocera, que habló bajo la condición reglamentaria de no ser identificada.
El sospechoso Driss Oukabir fue arrestado el jueves en Ripoll, en el noreste, lo mismo que otros dos identificados por la prensa española como Mohammed Aalla y Salh el Karib. La policía no ha confirmado estos dos últimos nombres.
Detenidos por atentados en Cataluña. Foto: AFP
El único prófugo de la célula, Younes Abouyaaqoub, fue abatido el lunes por las autoridades catalanas, tras ser avistado y denunciado por vecinos.
Según las autoridades, hay “pruebas científicas” de que Abouyaaqoub, de 22 años, conducía la furgoneta que provocó el atropello masivo en el paseo de Las Ramblas, el jueves. En su huida, el fallecido secuestró un auto y mató a puñaladas a su conductor.
El hermano de Abouyaaqoub y sus amigos formaban el resto de la célula extremista de 12 miembros, en la que había también un imán, que fue una de las dos víctimas mortales de la vivienda de Alcanar.
La Policía recalcó que con la muerte del autor material de los ataques, la célula extremista quedó desarticulada.