Norma Lucrecia, mejor conocida como La “Pirulina“, es una mujer que con sus llamativos atuendos se roba las miradas en las protestas o caminatas.
Sus coloridos y llamativos trajes la han hecho protagonista de las portadas de los medios.
Se le ha visto en manifestaciones cívicas o sectoriales, desfiles bufos de la Usac, besando policías o periodistas y hasta insultando a políticos acusados de corrupción, entre otros.
Es uno de los personajes urbanos más conocidos en el Centro Histórico de la capital guatemalteca.
¡De nuevo la vemos!
La famosa activista se ausentó de los medios, luego de que intentara quitarse la vida saltando del puente del incienso.
Para su fortuna, socorristas evitaron que se lanzara.
La Pirulina regresó para unirse al paro nacional convocado por la Universidad San Carlos de Guatemala y por "Justicia Ya!".
Luciendo un traje típico, Norma está en la Plaza Central con un altoparlante pidiendo una cosa.
Infancia dolorosa
Ella nació en una familia sencilla. A los 13 años un hombre la violó y eso la obligó a huir de su casa.
Fue indigente, durmió en la calle y no tenía que comer.
Cerca de cumplir 15 años encontró trabajo como prostituta en un bar de la zona 4. 10 años después logró dejar esa profesión.
Ahora se dedica a estar al frente de manifestaciones, protestas, marchas y plantones.
Disfrazada o sin ropa le ha dicho las cosas que le molestan en la cara de muchos políticos acusados de corrupción.