A seis meses de la muerte de la periodista sueca, Kim Wall, cuyos restos fueron hallados en bolsas de plástico en varios puntos de la bahía de Køge, en Dinamarca, siguen saliendo a la luz nuevos y escabrosos detalles sobre el caso.
Este miércoles, autoridades revelaron que el inventor danés, Peter Madsen, principal señalado por el asesinato, amarró y torturó a la víctima antes de matarla y descuartizarla a bordo de su submarino. Los hechos ocurrieron el 21 de agosto del año pasado, cuando Wall realizaba una entrevista a Madsen.
De acuerdo con el registro policial, citado por la agencia AFP, el acusado amarró a la periodista de la cabeza, los brazos y la piernas antes de golpearla, "apuñalarla y mutilarla", incluyendo 14 puñaladas en su área genital.
Después, descuartizó el cuerpo, puso los restos en bolsas separadas con objetos de metal pesados y los lanzó al agua. Las causas de la muerte no han sido definidas, pero investigadores creen que fue degollamiento o estrangulación.
Madsen, quien fue arrestado por un corto periodo de tiempo después de la desaparición de Wall, admitió haber descuartizado y lanzado el cuerpo al mar, pero negó haberla matado deliberadamente o haber tenido relaciones sexuales con ella.
Los cargos de homicidio predeterminado, profanación de un cadáver y agresión sexual, entre otros, le fueron imputados el 16 de enero pasado.
El juicio en contra de Madsen, de 47 años, comenzará el 8 de marzo, y el veredicto final podría conocerse hacia el 25 de abril.