En un encuentro que duró cerca de 40 minutos, el estadounidense Rex Tillerson se reunió este lunes con Mauricio Macri en la residencia oficial de Olivos.
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El subsecretario de Estado, Steve Goldstein, apuntó que la reunión transcurrió “muy, muy bien”, aunque no proporcionó mayores detalles. La presidencia argentina, por su parte, refirió que ambos líderes trataron la situación política regional y temas económicos y comerciales. Además, el secretario de Estado le transmitió a Macri un “afectuoso saludo” de parte del presidente Donald Trump.
Tillerson llegó a Argentina el sábado procedente de México. Su primera parada fue en Bariloche, donde se reunió con académicos y autoridades ambientales, y ahora se dirige a Lima, Perú, para continuar con su gira latinoamericana. También visitará Colombia y Jamaica.
Posibles nuevas sanciones a Venezuela
Durante su visita a Buenos Aires, el funcionario estadounidense reiteró que Washington quiere unas “elecciones libres, imparciales y verificables” en Venezuela, y desea aplicar suficiente presión para poner fin a la crisis en el país sudamericano.
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El gobierno en Caracas ha enfrentado críticas generalizadas por su decisión de convocar a elecciones presidenciales bajo condiciones que los opositores consideran son muy favorecedoras para el presidente Nicolás Maduro.
Sin embargo, Tillerson también señaló que quiere encontrar la forma de mitigar el impacto negativo que las sanciones tendrían en las compañías estadounidenses de petróleo, y en otros países de la región que dependen del crudo venezolano.
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“La situación se está volviendo bastante grave en Venezuela, así que uno de los aspectos a considerar para sancionar el petróleo es qué efecto tendría en el pueblo venezolano, y si es una medida que pudiera llevar esto a su fin, a un fin más rápido”, indicó el secretario de Estado. “No hacer nada para acabar con esto es también pedirle al pueblo venezolano que sufra mucho más tiempo”.
Venezuela tiene las mayores reservas petroleras del mundo y es el tercer proveedor más grande de Estados Unidos. La industria estadounidense del petróleo dice que una prohibición a las importaciones de crudo venezolanas dañaría los empleos de Estados Unidos e incrementaría los costos de la gasolina.
*Con información de AP y AFP