El Comité de Investigación de Rusia informó que sus agentes interrogaron a los empleados de la compañía Saratov Airlines, a los empleados del aeropuerto que prepararon el accidentado avión An-148 antes del despegue y a los controladores aéreos.
Según las autoridades, sin embargo, no se detectó ningún problema técnico antes de la salida de la aeronave.
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Los investigadores indicaron que estudiaban todas las hipótesis de posibles causas, citando las condiciones climáticas y el factor humano, aunque no mencionaron la pista terrorista.
En las operaciones del domingo se pudo hallar una caja negra, la cual contiene los datos del vuelo. El avión estaba en servicio desde 2010.
La compañía decidió suspender "temporalmente" la utilización de este modelo, que puede transportar hasta a 85 pasajeros, y tiene un alcance de 3 mil 500 kilómetros.
Con base en Saratov (Volga), Saratov Airlines utiliza esencialmente aviones Antonov o Yakovlev. Esta compañía, que no había estado implicada en un accidente mortal desde el fin de la URSS en 1991, tiene como destinos fundamentalmente ciudades de provincia rusas, así como capitales del Cáucaso.
Por otro lado, los restos mortales están en tal estado que "será necesario un examen genético" para poder identificar a las víctimas, indicó el ministro de transportes ruso, Maxim Sokolov, quien preciso que esto podría llevar "entre dos y tres meses".
El último accidente mortal de un avión en territorio ruso se remonta a diciembre de 2016, cuando un aparato militar Tu-154 se estrelló poco después del despegue en Adler (sur). Entre las víctimas figuraban más de 60 miembros de los coros del Ejército Rojo.
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