La cifra de muertos aumentó a por lo menos cinco el domingo después de que fuertes tormentas eléctricas azotaran la región central de Estados Unidos, desatando un tornado que dañó viviendas y generó extensas inundaciones desde el norte de la región central hasta los Apalaches.
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El sistema, que se extiende de Texas hasta las provincias marítimas canadienses, ya había sido motivo de varios avisos de emergencia incluso antes de su llegada.
En el suroeste de Michigan se encontró el domingo el cuerpo de un hombre de 48 años que flotaba en las inundaciones en Kalamazoo, informó el teniente de Seguridad Pública de la ciudad, David Thomas. La policía no reveló la identidad de la víctima hasta notificar a sus familiares.
Thomas dijo que el deceso no parecía sospechoso pero aún se desconoce la causa. Se programó una necropsia para la mañana del lunes. Kalamazoo resultó afectada por inundaciones debido a las fuertes lluvias de la semana pasada y la nieve que se derrite.
En Kentucky, las autoridades informaron de la muerte de tres personas. Dos de los cuerpos fueron recuperados en vehículos sumergidos el sábado, en dos incidentes distintos.
Un cadáver fue extraído de un vehículo que cayó en una zanja en el oeste de Kentucky cerca de Morganfield, informó el Cuerpo de Bomberos de Henderson en Facebook. El cuerpo fue enviado al forense para que se le realice la autopsia.
En el centro-sur de Kentucky, el cadáver de un hombre fue recuperado el sábado de un vehículo sumergido en un arroyo cuyo nivel aumentó debido a las inundaciones cerca de la comunidad de Franklin, dijo en un comunicado la jefatura de policía del condado Simpson. El nombre de la víctima es retenido en lo que se avisa a sus parientes.
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A unos 32 kilómetros (20 millas) de distancia, Dallas Jane Combs, de 79 años, murió después de que un supuesto tornado destruyó el sábado su casa en Adairville, dijo la jefatura de policía del condado Logan a diversos medios. Las autoridades policiales dijeron que Combs se encontraba en el interior cuando su casa se le vino abajo. Fue declarada muerta en el lugar.
El esposo de Combs estaba afuera mientras colocaba un plástico para proteger la casa de la lluvia cuando fue arrojado a la zona del sótano. Sufrió lesiones menores.
El quinto deceso ocurrió en el noreste de Arkansas, donde un hombre de 83 años murió cuando los ventarrones volcaron su casa móvil. El jefe de la policía del condado Clay, Terry Miller, dijo a KAITV que Albert Foster falleció el sábado en la noche después de que el viento arrastró la vivienda hasta un estanque.
