Durante siglos, la doctrina de la iglesia Católica Apostólica Romana ha enseñado a sus fieles desde el bautismo que después de la muerte viene el infierno, el cielo o el purgatorio.
Sin embargo, la primera opción, la más temida por los pecadores se habría visto descartada por la máxima autoridad de la iglesia.
El papa Francisco habría dicho en una entrevista al medio italiano "La Reppublica" que "no son castigados, aquellos que se arrepienten obtienen el perdón de Dios y van entre las filas de las almas que lo contemplan".
Sin embargo, quienes no tienen este destino les espero uno muy distinto al que se enseñó por años.
Las declaraciones fueron "desmentidas" por el Vaticano a través de un comunicado. Sin embargo, el mayor argumento de la entidad es que el periodista no llevaba grabación de las conversaciones, en vez de la postura de la iglesia respecto al infierno.
La declaración fue polémica, tanto que llegó al extremo de "remecer" físicamente al Vaticano. Esto luego de que horas después de las supuestas declaraciones del Papa, el techo de la legendaria Basílica de San Pedro se comenzó a derrumbar.
Los adoradores que se encontraban visitando el templo debieron esconderse en la estatua de Piedad del Vaticano, realizada por Miguel Angel.
La entidad religiosa informó que no hubo heridos y que los daños ocurridos en el techo son reparables y mínimos. Además el edificio se cerró rápidamente al público por seguridad y se espera que esté reparado para la siguiente fiesta de Semana Santa.