El tribunal del estado de Schleswig-Holstein, donde Carles Puigdemont permanece encarcelado, estimó que el delito de “rebelión” que presentó la justicia española en la orden de arresto no es equiparable en derecho alemán.
El texto oficial de las autoridades alemanas explica que solo el delito de malversación de fondos públicos (por el que también es señalado el líder independentista) puede ser retenido para una posible entrega a España. Ese cargo no amerita la detención preventiva de Puigdemont, señala el comunicado judicial.
El tribunal señaló que el hecho de que no puede ser extraditado reduce la posibilidad de que se dé a la fuga, y por lo tanto puede ser dejado en libertad bajo fianza.
En Madrid, el gobierno español declaró que respetará la decisión.
“El gobierno no opina sobre las decisiones judiciales. Las respeta siempre; cuando le gustan y cuando no”, dijo un vocero del gobierno español.
“El gobierno está convencido de que la justicia española adoptará las medidas más adecuadas ante estas nuevas circunstancias para velar por el cumplimiento de las leyes de nuestro país”, añadió la fuente.
Horas antes, la justicia española había acusado de sedición al exdirector de la policía autonómica de Cataluña y a otros responsables de seguridad de la región, por su papel en los eventos que llevaron al referéndum de independencia celebrado ilegalmente en octubre del año pasado.
Según el auto de acusación de la jueza de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, el exdirector de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, formó parte de un plan organizado para procurar la independencia de Cataluña, lo cual está prohibido por las cortes, porque la Constitución dice que España es “indivisible”.
La presentación de cargos es otro golpe legal contra los independentistas de la región, que tienen la esperanza de crear un nuevo país. Las cortes españolas han bloqueado varias veces los intentos de independencia y han presentado cargos contra quienes apoyan la secesión.
Este jueves también se presentaron cargos contra otros dos miembros de la policía regional y un funcionario de la consejería de Interior de la región del noreste de España.
Desde la cárcel, Puigdemont había enviado una carta abierta en la que exhortaba al Parlamento catalán a que nuevamente intentara elegir al encarcelado activista Jordi Sánchez como el presidente de la región.
Puigdemont también propuso a Sánchez (su asistente en el partido Juntos por Cataluña) el mes pasado, pero el Tribunal Supremo de España rehusó dejarlo libre para ir a la sesión del Parlamento.
Volver a tratar de que Sánchez sea presidente de la región mantendría el tema de la independencia con vida política.
*Con información de AFP y AP