Detectives de la Policía llegaron a una vivienda ubicada en la colonia Los Amates, en la zona 18, para ejecutar órdenes de captura como parte de una investigación para esclarecer el asesinato de un agente de PNC, pero fueron recibido a balazos.
En la vivienda se encontraban tres hombres, hermanos según el reporte preliminar de la Policía, que serían los presuntos responsables de haber atacado a balazos a dos elementos de PNC el 23 de marzo de este año, hecho en el que murió un agente.
Enfrentamiento y fuga
Cuando los sospechosos observaron que la Policía los tenía rodeados abrieron fuego. Las fuerzas de seguridad se defendieron, pero los agresores, además de pistolas, tenían dos granadas, y las usaron, aunque no lograron provocar daños mayores a los elementos de PNC.
Con los balazos los hombres querían distraer a sus captores y ganar tiempo para escapar por la parte trasera de la vivienda, que da a un barranco.
El hombre que lanzó las dos granadas murió en la balacera. Fue identificado como Adalberto López Nájera, de 27 años. Sus hermanos lograron escapar. Las cuerdas que usaron no eran lazos comunes, sino eran similares a los usados por los escaladores para hacer rapel.
Antes que los peritos del Ministerio Público buscaran evidencias, se requirió el trabajo de un perro entrenado para estar seguros de que en el área ya no había peligro. Un elemento de las fuerzas especiales de la PNC resultó lesionado por el estallido, ya que fragmentos del vidrio de las ventanas de la casa le impactaron una mano.
Antecedente
Según la investigación, “Los Chamucos” se dedican al sicariato y al secuestro, pero las autoridades no han revelados más detalles de su modo de operar.
El 23 de marzo los policías Armando Lajuj, de 33 años, y Manuel Hernández, custodiaban al secretario de un juzgado de Paz local en la aldea La Ceiba, en San Pedro Pinula, Jalapa, cuando fueron atacados a balazos.
Lajuj, quiene tenía tres años y 1 mes de servicio, murió baleado mientras que su compañero sobrevivió a la agresión.