Tras la sangrienta jornada que dejó al menos 58 muertos en la Franja de Gaza, el Reino Unido se sumó al llamado internacional en contra de la violencia y exigió una "investigación independiente sobre lo ocurrido".
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Alistair Burt, secretario de Estado para Oriente Medio y África del Norte en el Parlamento británico, manifestó el respaldo de su país a una investigación independiente.
"Lamentamos profundamente el alcance del recurso a balas reales ayer (…) es urgente relanzar el proceso de paz" en la región, consideró.
"Todas las circunstancias en la región pueden constituir una oportunidad, incluso tragedias como la de ayer pueden servir de trampolín para la paz en lugar de alimentar nuevos enfrentamientos".
El gobierno alemán también se declaró favorable a una investigación, "para aclarar la violencia y los sangrientos enfrentamientos en la zona fronteriza", según el portavoz de la canciller Angela Merkel, Steffen Seibert.
Sin embargo, al igual que Estados Unidos, Berlín responsabilizó de la masacre al movimiento palestino Hamas, que controla Gaza.
"Está claro que todo el mundo goza del derecho a manifestarse libremente, pero está igual de claro que este derecho de manifestación pacífica no debe transformarse en movimiento violento y Hamas apuesta por una escalada de la violencia", subrayó Seibert.
Estados Unidos bloqueó el lunes la adopción de un comunicado del Consejo de Seguridad de la ONU pidiendo una investigación independiente. Este martes, sin embargo, se realiza una reunión al respecto.
Jornada violenta
Casi 60 palestinos murieron el lunes y más de 2 mil resultaron heridos por disparos de soldados israelíes en la Franja de Gaza durante los enfrentamientos y manifestaciones en contra de la apertura de la embajada estadounidense en Jerusalén.
La inauguración cumplió una de las promesas más polémicas de la política exterior de Donald Trump, ignorando la reprobación internacional y la indignación palestina.
Además de Reino Unido y Alemania, Irlanda también pidió una "investigación internacional independiente (…) conducida por la ONU" sobre esta mortífera violencia.
El gobierno de Dublín convocó, además, este martes al embajador de Israel para expresarle su "estupor" y su "consternación por el número de muertos y heridos".