La pobreza y el desempleo obligaron a Jaime Carrillo, de 40 años, a emprender un largo y riesgoso trayecto hacia los Estados Unidos. Con su esposa y sus hijos de 1, 11 y 17 años salieron el 28 de abril de Chiantla, Huehuetenango.
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Él les había prometido un mejor futuro, el cual quedó frustrado el 10 de mayo, cuando la Patrulla Fronteriza los detuvo en su intento por ingresar al territorio norteamericano.
"Me separaron y no supe más de mi familia. Me voy para Huehue, pero los regresaré a buscar", dijo Carillo mientras cargaba una bolsa roja, tipo costal, con algunas de sus pertenencias que llevaba antes de ingresar al centro de detención.
Ayer antes del mediodía Carrillo y otros 292 guatemaltecos regresaron al país en tres vuelos de deportados que arribaron a la FAG.
La familia del entrevistado es una de las miles que han sido separadas en la frontera entre México y Estados Unidos por la política migratoria estadounidense.
Se conocieron en el centro
Alba y Adelia llegaron en uno de los vuelos de retornados.
El miedo y la angustia las hizo buenas amigas desde el centro de detención.
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Alba tenía miedo de salir de la FAG. No tenía dinero para viajar a Quetzaltenango porque los únicos US$20 que traía no los pudo cambiar en el banco porque su “billete estaba manchado”.
Adelia le daba ánimos. Sus tres intentos por llegar a EE. UU. la han hecho más fuerte.
"Apúrate, vámonos, tenemos que irnos y regresar por la deuda que cargamos encima. Si nos morimos allá, ni modo", le decía.
El dato
La Casa del Migrante les ofrece wifi, carga para los celulares y cintas gratis a los retornados.
Los que no tienen contacto con su familia pueden quedarse en sus instalaciones donde les dan hospedaje y alimentación.
La Asociación Retornados Guatemaltecos les regala un minuto para hacer una llamada local o internacional.
La frase
- "A mi edad, 47 años, ya no creo regresar. Me trataron como a un perro. Antes de que aterrizáramos nos quitaron las esposas", indicó Gustavo Díaz, quien vivió durante 17 años en EE.UU.
En cifras
- Primer vuelo (105 personas): 93 hombres, 10 mujeres y 2 niños, de Brownsville.
- Segundo vuelo (95 personas): 87 hombres y 8 mujeres.
- Tercer vuelo (93 personas): 89 hombres y 4 mujeres.