El pánico se apoderó de miles en la "Marcha de las Flores", en el suroeste de Managua, cuando un grupo se separó de la ruta y fue atacado a balazos al pasar por una propiedad ocupada por civiles encapuchados y fuertemente armados.
"Diez personas fueron heridas durante la marcha", una de ellas llevada de gravedad a un hospital, dijo a la AFP Vilma Núñez, presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
Un equipo de AFP pudo ver que un hombre cayó con un impacto de bala en la cabeza, pero los grupos de derechos humanos verificaban si hubo muertos. Entre los heridos había una niña.
Al concluir la marcha en la rotonda Jean Paul Genie, algunos se apartaron para ir a apoyar a estudiantes atrincherados en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN). Allí, más temprano habían salido heridos dos jóvenes de un ataque contra una barricada.
Hombres fuertemente armados les dispararon cuando pasaban en la propiedad del grupo empresarial Cohen, cuyos representantes habían denunciado que grupos afines a Ortega llevaron bajo engaño a campesinos a invadir las tierras, como represalia por su apoyo a las protestas.
"Hacemos llamado a que cese la represión que nos está dejando derramamiento de sangre innecesarios", declaró Álvaro Leiva, representante de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).