El Juzgado Décimo de Primera Instancia Penal concedió arresto domiciliario a magistrada suspendida Blanca Stalling, señalada del delito de tráfico de influencias y resistencia.
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Un oficial del referido juzgado impidió a los periodistas documentar la audiencia en la cual Stalling solicitaría una medida sustitutiva a una jueza suplente.
Juan Francisco Sandoval, jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad del Ministerio Público, explicó que se declaró con lugar la solicitud de arresto domiciliario a Stalling, ya que se consideró que no existe peligro de fuga ni de obstaculización a la averiguación de la verdad.
"El delito de resistencia es un delito menos grave y que el delito de tráfico de influencias no tiene prohibición para el otorgamiento de medida sustitutiva", es el argumento de la jueza, explicó el fiscal Sandoval.
Sandoval indicó que entre los requerimiento la magistrada separada del cargo no podrá salir del departamento de Guatemala y deberá imprimir su huella cada semana. No se le impuso una fianza por la medida sustitutiva.
El jefe de la fiscalía indicó que apelarán dicha resolución y analizarán la totalidad de lo resuelto.
Señalamientos
Stalling fue denunciada por el juez Carlos Ruano en enero de 2017 por supuestamente presionarlo para que beneficiara con medidas sustitutivas a su hijo Otto Molina Stalling, sindicado en el caso IGSS-Pisa.
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El juzgador detalló que fue citado por la magistrada y grabó lo que conversaron durante esa reunión, por el cual se le imputó el delito de tráfico de influencias.
Por estos señalamientos, se giró orden de captura en contra de Stalling, quien intentó evadir a la justicia con una peluca.
