Gustavo Martínez Luna, exsecretario privado del expresidente Otto Pérez Molina, y otros dos sospechosos en el caso "TCQ" recuperarán su libertad por orden del Juzgado de Mayor Riesgo B. Uno más continuará en prisión preventiva.
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El juez Miguel Ángel Gálvez estimó este miércoles 12 de septiembre que es prudente modificar las medidas de coerción a los señalados, derivado del tiempo que ha transcurrido desde que comenzó el proceso.
Durante la audiencia, el Ministerio Público (MP), la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y la Procuraduría General de la Nación (PGN) estuvieron de acuerdo con las peticiones que realizaron los procesados Mario Ruano Sanjosé y Lázaro Reyes, extrabajador del Organismo Judicial y exsindicalista de la Empresa Portuaria Quetzal, respectivamente.
Sin embargo, las tres entidades se opusieron a las solicitudes de Martínez Luna y del español Juan José Suárez. En ambos casos se manifestó que es latente el peligro de fuga.
Beneficios a vinculados en el caso "TCQ"
Gálvez determinó que los vinculados al caso TCQ deben permanecer en libertad con algunas restricciones, y así fue su resolución:
Gustavo Martínez Luna: permanecerá en arresto domiciliario pero tiene autorización para ejercer su trabajo como abogado y notario, así como instructor de equitación. Además, tiene prohibido comunicarse con otros procesados o sospechosos en el caso, así como acercarse a la Torre de Tribunales, a excepción de cuando sea citado. Y cada 15 días debe marcar su huella dactilar en el sistema de control biométrico del MP en la capital.
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Mario Ruano Sanjosé: se ordenó que guarde arresto domiciliario. Debe cancelar una fianza de Q50 mil previo a que el Juzgado emita los documentos para que el Sistema Penitenciario le permita salir de prisión. Tiene prohibición para comunicarse con otros sospechosos y debe acreditar su permanencia en el país cada 15 días en la Fiscalía de la capital por medio del sistema de control biométrico.
Lázaro Reyes: se le impuso una fianza de Q100 mil la cual debe cancelar previo a que se emitan los documentos con los cuales se le permitirá salir de la cárcel. Se le ordenó que no se acerque a la Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ). Por último, se le instruyó para que cada 15 días acuda al MP para marcar el sistema de control biométrico, y si decide volver a residir en Escuintla, deberá acudir a la Fiscalía de ese departamento.
El Juzgado dictó en contra de los tres una orden de arraigo.
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