El presidente Jimmy Morales militarizó nuevamente parte del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala con policías y soldados de élite, armados con fusiles M16 y lanzagranadas, y fue resguardado por varios agentes policiales en la Plaza de la Constitución para dar su discurso de aniversario por la independencia del país, en el que se lanzó contra los medios nacionales y extranjeros.
PUBLICIDAD
“Es preocupante el silencio, la manipulación de la información… No me preocupa el grito de los iracundos, me preocupa el silencio de los medios de comunicación”, afirmó el mandatario.
Mientras Morales pronunciaba su discurso junto a algunos funcionarios de gobierno rodeado de miles de policías, cientos de manifestantes que portaban carteles, globos con su figura y una nariz de payaso le gritaban “¡fuera, fuera, que renuncie!” en la misma plaza donde se celebraron los actos protocolarios por la independencia.
El presidente consideró que los medios nacionales e internacionales minimizan “la violencia de grupos desestabilizadores”.
Este viernes, el Ministerio Público anunció que había abierto dos expedientes por posible violación a las leyes de libertad de expresión y libertad de manifestación debido al uso de policías que restringieron el paso de miles de personas por el área, y que revisaron a niños, mujeres, hombres y ancianos.
Un día antes la Corte de Constitucionalidad había ordenado al presidente, al ministro de Defensa y al ministro de Gobernación garantizar la libertad de manifestación y resguardar la seguridad de los inconformes.
Según analistas, Morales enfrenta una de la crisis más graves de su gobierno por haber anunciado, con un año de anticipación, el fin de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un órgano de las Naciones Unidas que combate los aparatos clandestinos y de seguridad incrustados en el estado guatemalteco y lidera la lucha anticorrupción.
PUBLICIDAD
La CICIG y el Ministerio Público han solicitado en dos ocasiones que se le retire la inmunidad a Morales para investigarlo por varios delitos, incluido el de ocultar información financiera y financiamiento electoral anónimo e ilícito del partido Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación) que lo llevó al poder en 2015.
En respuesta, Morales anunció el fin de la CICIG y prohibió la entrada al país de su titular, el comisionado Iván Velásquez, lo que desató la crisis de gobierno.
*Con información de AP y Omar Solis.