Este miércoles, 31 de octubre, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos denunció el asesinato de 20 activistas en Guatemala, durante 2018.
La CIDH urgió a Guatemala a tomar medidas para "garantizar el derecho a la vida, integridad y seguridad de personas defensoras de DDHH, especialmente de líderes y lideresas campesinas e indígenas".
La organización contabilizó las últimas muertes el 10 de octubre.
Obligados a investigar
La CIDH también recordó que el Estado tiene la obligación de abrir investigaciones para determinar las circunstancias de la muerte de estos activistas.
La CIDH hizo un inciso especial con respecto a las muertes de mujeres dirigentes, recordando que "el Estado debe tomar debidamente en cuenta que al riesgo inherente que encierra su labor se suma el contexto de discriminación en razón de su género".
Además, enfatizo en que "se ven expuestas a actitudes misóginas, a amenazas de agresión sexual, a insultos basados en su género e incluso, a su muerte”.