Estados Unidos aumentó este jueves las presiones contra Venezuela al anunciar sanciones contra las exportaciones de oro, acusando al país de formar, junto a Cuba y Nicaragua, una “troika de la tiranía”.
“Hoy estoy muy orgulloso de compartir que el presidente Trump firmó un decreto ejecutivo para imponer nuevas y duras sanciones contra Venezuela”, dijo en un discurso desde Miami el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
La Casa Blanca publicó este jueves el decreto que apunta hacia el sector del oro y Bolton explicó a la prensa que las sanciones entrarán en vigor de forma inmediata y explicó que este era uno de los últimos sectores que le quedaba libre de limitaciones al gobierno venezolano.
En su discurso, Bolton denunció a Cuba, Venezuela y Nicaragua como “la troika de la tiranía” y dijo que el presidente estadounidense va a tomar “acciones directas contra estos tres regímenes”.
Según las sanciones ya existentes, ni Venezuela ni la petrolera estatal PDVSA pueden transar deuda en Estados Unidos, lo que en la práctica cierra el mercado al país. Las prohibiciones también afectan al presidente venezolano, Nicolás Maduro, a su esposa, y a varios ministros y líderes chavistas.
“Bajo el mando del presidente Trump, Estados Unidos va a tomar acciones directas contra estos tres regímenes para defender el imperio de la ley, la libertad, la decencia humana mínima en nuestra región”, afirmó Bolton en un discurso.
El alto funcionario dijo que Estados Unidos espera con ansias “ver cómo cada vértice del triángulo cae: en La Habana, en Caracas y en Managua”.
Y agregó que mientras llega ese día, las personas de la región “pueden estar seguras de que Estados Unidos está con ellas contra las fuerzas de la opresión, el totalitarismo y la dominación”.
“Bajo el mando del presidente Trump, Estados Unidos va a tomar acciones directas contra estos tres regímenes para defender el imperio de la ley, la libertad, la decencia humana mínima en nuestra región”, afirmó el funcionario.
“No más canales secretos” con Cuba
Bolton, que habló desde la Torre de la Libertad (Freedom Tower), un emblemático edificio en el centro de Miami donde se recibía a los cubanos llegados entre 1960 y 1970, también anunció que Estados Unidos sumó más entidades vinculadas con los militares cubanos o con los servicios de inteligencia a la lista de empresas con restricciones en Estados Unidos.
“El Departamento de Estado sumó dos decenas de entidades adicionales, que son propiedad o que están controladas por los militares cubanos o los servicios de inteligencia, a la lista de entidades con las cuales las transacciones financieras están prohibidas para las personas en Estados Unidos”, afirmó.
Bolton dijo que la medida incluye acciones concretas para impedir que los dólares estadounidenses lleguen a los militares cubanos, al sector de la seguridad y a los servicios de inteligencia.
Su discurso coincidió con el momento en que la Asamblea General de la ONU rechazaba un intento de Estados Unidos de criticar el historial de los derechos humanos en Cuba y condenó por 27º año consecutivo el bloqueo de Washington.
“En este gobierno, no va a haber más canales secretos entre Cuba y Estados Unidos. Nuestra política es transparente para que el pueblo estadounidense y el mundo vean”, agregó Bolton en relación al diálogo comenzado por el expresidente estadounidense Barack Obama durante su gobierno que puso fin en 2015 a medio siglo de ruptura diplomática entre ambos países.