Al menos 43 personas murieron el martes en un atentado suicida durante una reunión de altos jerarcas religiosos en Kabul, capital de Afganistán.
La explosión también dejó heridas a 83 personas, de las cuales al menos 24 se encuentran en estado crítico, informó el portavoz del ministerio de Salud, Wahid Majroh.
“Un suicida hizo detonar su carga explosiva en el lugar durante una ceremonia”, dijo por su parte el portavoz de la policía de Kabul, Basir Mujahid.
El ministerio de Defensa confirmó la información y subrayó que “en la ceremonia participaban tanto el público como ulemas de todo el país”.
El ataque, que se produjo en una sala de fiestas durante la reunión de ulemas, para celebrar el aniversario del profeta Mahoma, es uno de los más sangrientos perpetrados en la capital afgana en las últimas semanas.
La oenegé italiana Emergency indicó a través de Twitter que una docena de heridos fue ingresada en su centro de asistencia de Kabul, y que todos presentaban lesiones “de gravedad”.
Según fuentes, citadas por la AFP, en el evento habían cerca de mil personas.
De momento no hubo reivindicación por el ataque, pero el grupo Estado Islámico (EI) reivindicó la mayoría de los últimos ataques suicida en Kabul, ciudad que se convirtió en la más peligrosa del país para los civiles.
Elecciones y violencia
En septiembre, otro ataque suicida contra afganos que protestaban contra el nombramiento de un jefe de la policía local en la provincia de Nangarhar dejó al menos 68 muertos y 165 heridos. Ningún grupo reivindicó la explosión.
En enero, una ambulancia repleta de explosivos estalló en una concurrida calle en el corazón de Kabul, provocando la muerte de unas 100 personas, la mayoría civiles. El ataque se lo adjudicaron los talibanes.
Las elecciones legislativas del mes pasado también se vieron empañadas por una ola de violencia en todo el país. Centenares de personas murieron o resultaron heridas en ataques vinculados a los comicios.
El ataque de este martes, además se produce en momentos en que los talibanes presionan a las fuerzas de seguridad afganas a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional para iniciar un diálogo de paz.
*Con información de AFP