El gobierno hondureño destacó la noche del lunes las medidas tomadas por el presidente Juan Orlando Hernández contra el narcotráfico, ante las impactantes acusaciones presentadas contra su hermano menor en Estados Unidos por "tráfico de drogas a gran escala".
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"Hace diez años, Honduras estaba en camino de convertirse en narcoestado, sin embargo, la historia cambió gracias a las acciones y políticas contundentes y consecuentes del presidente Hernández (…) en la lucha contra el narcotráfico", expuso en una comparecencia ante la prensa el ministro de la Presidencia, Ebal Díaz.
Fiscales estadounidenses anunciaron el lunes que Juan Antonio Hernández, hermano del presidente de Honduras, fue acusado de traficar toneladas de cocaína a Estados Unidos, en un caso que causó un fuerte impacto en la sociedad hondureña.
Narcotraficante a gran escala
El excongresista hondureño, más conocido como Tony Hernández, fue arrestado el viernes sospechoso de vínculos con el narcotráfico, y compareció la tarde del lunes ante una corte federal en Miami.
Los fiscales dijeron que Hernández, de 40 años, es "un narcotraficante de gran escala", que conspiró con redes del crimen organizado trasnacional en México y Colombia para importar grandes cantidades de cocaína a Estados Unidos desde 2004 hasta 2016.
Díaz añadió que cinco carteles "se desarticularon" en cinco años con las políticas presidenciales: 'Los Cachiros', 'Valle-Valle', 'Valle de Sula, 'Cartel de Olancho' y 'Cartel del sur'.
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"Tan efectivas han sido las políticas del gobierno del presidente Hernández, que Honduras pasó del lugar 1 al 12 como país receptor de drogas", aseguró.
Según el funcionario, el último informe del Centro Internacional Marítimo Contra el Narcotráfico, da cuenta que los otros 11 son Guatemala, Costa Rica, El Salvador, República Dominicana, México, Ecuador, Venezuela, Perú, Puerto Rico, Chile y Canadá.
Leyes contra el narco
El ministro dio también una lista de 16 leyes y organizaciones policiales creadas para combatir el narcotráfico desde 2010, cuando Juan Orlando Hernández era presidente del Congreso.
Durante su gestión como presidente de la República desde 2014, destacó que la fiscalía ha incautado bienes a los capos valoradas en unos 1.000 millones de lempiras (cerca de 42 millones de dólares), incautado 14,000 armas de fuego, destruido 22 aeropistas clandestinas para aterrizajes de narcoavionetas y fortalecido el escudo aéreo, marítimo y terrestre.
