Durante las fiestas de fin de año, los cuerpos de socorro advierten sobre los cuidados que se deben de tener al manipular los juegos pirotécnicos, puesto que la pólvora puede causar serios daños si no se toman las recomendaciones necesarias.
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Sin embargo, no siempre se atienen las normas y se expone la vida, tanto de adultos como de niños e incluso animales, tal como sucedió en la ciudad de San Lorenzo, en Paraguay.
Según la información que se ha compartido en las redes sociales, un grupo de niños jugaba con cohetillos y acercaron una bomba con la mecha encendida al hocico de un perro. Este lo tomó con los dientes y segundos más tarde le explotó.
El animal canino sufrió serias quemaduras en su maxilar superior e inferior, se desconoce qué ocurrió instantes después; sin embargo el perro llegó a manos del personal de la Fundación Maris Llorens quienes lo ingresaron a una clínica veterinaria.
En el lugar, asistió la emergencia en primera instancia la médico veterinaria Dalia Benitez y quedó bajo observación.
Las imágenes fueron compartidas en las redes sociales y han sido compartidas cientos de veces, además han recibido comentarios que desaprueban la irresponsabilidad de los padres por no supervisar a sus hijos durante la manipulación de pólvora.
"¿Qué es lo que enseñan los padres a sus hijos?, ¿A dañar a los animales?", cuestionaba La fundación Maris Llorens.
