Cinco erupciones ha registrado en lo que va del 2018 el volcán de Fuego. Ubicado entre los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, este es uno de los colosos de Guatemala que presenta constante actividad.
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Cientos de personas se asentaron desde hace años en las faldas del volcán de Fuego. Los retumbos y explosiones, e incluso la presencia de partículas de ceniza que caen constantemente, no es algo inusual para quienes residen en el sector.
Sin embargo, el 3 de junio de este año, cuando todo indicaba que sería otra fase más de actividad volcánica, la situación se complicó. Ese día se inició la segunda erupción del volcán de Fuego y el saldo fue trágico.
Flujos piroclásticos y gruesas columnas de ceniza surgieron del coloso. Las familias intentaron escapar del lugar, pero solo algunas lo lograron. En fotografías y videos del día de la tragedia quedó plasmada la difícil situación que vivieron los pobladores.
Cuerpos de socorro, agentes de la Policía Nacional Civil, elementos del Ejército y decenas de voluntarios apoyaron en las labores de búsqueda de las víctimas. Y entre toneladas de material volcánico lograron rescatar los cuerpos de algunas. Mientras que otras, debido al riesgo que representaría continuar la búsqueda en el área, siguen sin ser encontradas.
Cifras
La cifra que maneja hasta la fecha el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) de víctimas mortales del volcán de Fuego que han sido identificadas es de 197, de un total de 318 casos ingresados a esa entidad.
De acuerdo con datos de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), se contabilizan 197 víctimas mortales por la erupción del volcán de Fuego. La cifra de desaparecidos es de 231 y la de personas afectadas es de 1 millón 714 mil 387.
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Cientos de personas continúan albergadas, algunas ya fueron instaladas en Albergues de Transición Unifamiliares, en donde permanecerán mientras se construye el complejo habitacional con el que serán beneficiados.
Después de la fuerte erupción de junio, quedó material volcánico acumulado en el coloso, por lo cual se ha dado el descenso de lahares. A manera de prevenir, las autoridades han evacuado en diferentes ocasiones a los habitantes de las comunidades aledañas.
Ese evento también dejó secuelas en la ruta nacional 14, que estuvo cerrada por varias semanas mientras era reparada porque el flujo piroclástico la dañó. Ahora ya se habilitó, pero está restringido el paso de vehículos de 6:00 a 14:00 horas.
Erupciones en el 2018
- Primera, 1 de febrero
- Segunda, 3 de junio
- Tercera, 12 de octubre
- Cuarta, 6 de noviembre
- Quinta, 18 de noviembre
