“Se cae la producción (petrolera) sin duda porque no hay inversión (…) pero también vamos a revisar lo del posible 'huachicoleo' en la venta del crudo", dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador, utilizando el término con el que se conoce popularmente al delito de robo de combustible en México.
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El mandatario explicó en conferencia de prensa que de la producción nacional, de 1.75 millones de barriles por día, casi un millón de barriles son exportados desde el puerto de Dos Bocas, en la costa del Golfo de México en el oriente del país.
“Queremos ver si es realmente un millón, si no hay piratería, mercado negro. Es que lo del 'huachicol' es una plaga, que invadió todo el gobierno, en todas las actividades”.
Plan contra el “huachicoleo”
El gobierno de López Obrador lanzó en los últimos días de diciembre un plan contra el robo de combustible, un crimen creciente que solo en 2017 provocó pérdidas por unos 3 mil millones de dólares a la petrolera estatal Petróleos Mexicanos.
El plan incluye el cierre de los ductos por los que se transporta buena parte del carburante y la distribución mediante camiones cisterna, más lentos e ineficientes, lo que ha provocado desabastecimiento y largas filas de automóviles en gasolineras, principalmente en estados del centro y el oeste del país.
El banco Citibanamex, uno de los más grandes del país, estimó en alrededor de 39 mil millones de pesos (2.054 millones de dólares) la pérdida bruta en el Producto Interno Bruto (PIB) atribuida a la escasez de combustible, “suponiendo que las condiciones vuelvan a la normalidad en los próximos días”.
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El banco estima que el efecto rebote de la actividad económica sería de 16 mil millones de pesos entre enero y febrero, con lo que la pérdida neta total sería de 23 mil 600 millones de pesos, o alrededor de 0.1 puntos porcentuales del PIB.
“Sin embargo, los costos de eficiencia y los impactos macroeconómicos también se intensificarían cuanto más tarde en reanudarse el servicio normal”, advirtió el banco en un reporte divulgado este miércoles.
El desabastecimiento por el cierre de ductos se inició alrededor del 4 de enero y aunque las largas filas en gasolineras se han aminorado esta semana, la contingencia continúa mientras militares refuerzan la vigilancia de 11 ductos principales y logran controlar los persistentes intentos de criminales de volver a saquearlos.
*Con información de AFP