El nombre Jorge Mario Moreira Reyes, alias “el Marino” sonó con más fuerza en reportes violencia desde inicio de la década del 2000.
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Pero su antecedente criminal se remonta a finales de los 90 cuando se le comenzó a identificar como integrante de la banda de secuestradores denominada “el Canguro”.
El nombre de ese grupo criminal es por el apoyo de Víctor Raúl Ibarra, dirigente de la banda de plagiarios.
Alias “el Canguro” era conocido y temido por sus vecinos en un sector de la zona 7, la misma en la que operó Moreira Reyes.
La Dirección General del Sistema Penitenciario registra que “el Marino” cumplía una condena de 50 años de prisión por plagio y secuestro.
Impune
La cárcel no reformó ni detuvo a Moreira Reyes en su actuar criminal.
Siempre encontró una manera de tener vínculos con personas en libertad, en algunas ocasiones eran sus convivientes.
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La Policía Nacional Civil (PNC) tiene registro de al menos dos de ellas. Una María del Carmen Monzón Sisimit, capturada en 2009 vinculada a una estructura de robo de vehículos.
El caso más reciente es el de Gabriela Rocío Argueta Ramos, aprehendida en la zona 7 y con supuestos nexos con una estructura de “el Marino".
La habilidad criminal le permitió a Moreira Reyes diversificar sus negocios, ya que coordinó grupos de roba carros y de venta de drogas.
Los golpes
En 2005 “el Marino” era uno de los más temidos, por lo sanguinario y por lo atrevido de sus golpes.
La Policía asegura que él fue el cerebro de dos asaltos a agencias bancarias, una en centro comercial en la zona 7, y el otro en la zona 1.
Asimismo, se le señala de estar detrás de la muerte violenta de dos de sus tíos.
Pero las mafias rivales nunca se quedaron de brazos cruzados, ya que algunos de sus parientes fueron asesinados.
En febrero del años pasado el Ministerio Público (MP) aseguró que Moreira Reyes coordinó desde la cárcel una estructura de venta de drogas al menudeo, sicariato, robo de vehículos, compra y venta ilegal de armas de fuego.
El área de operaciones era Guatemala y El progreso. La banda era denominada “Los del punto”.
La Fiscalía dijo que el reo estaba en la Granja Penal Cantel, en Quetzaltenango.
Imparable
Alias “el Marino” fue asesinado este miércoles en una cárcel en la que tuvo prácticamente su centro de operaciones.
En 2005 se le sindicó orquestar el secuestro de una joven de 14 años, hija del exgente del IGSS, César Sandoval, quien purgaba prisión por un desfalco millonario.
Además, en esa cárcel se le incautaron al menos 10 vehículos robados que fueron modificados en ese lugar.
La sospecha es que los automóviles eran alterados para transportar ilícitos o ser vendidos.
Otro rumor de la historia criminal de “el Marino” es que en Pavón tuvo secuestradas a algunas personas mientras sus lugartenientes negociaban los pagos desde otros penales.
La operación “Pavo Real”, ejecutada en 2006, supuso para la población el fin el reino de las mafias en ese recinto, pero con el transcurso de los años los ilícitos continuaron.
La evidencia del poder criminal son los resultados de las requisas, el asesinato en ese sitio del militar retirado Byron Lima Oliva y ahora de Jorge Mario Moreira Reyes.
