Al menos 30 bomberos murieron en China el fin de semana por un incendio forestal que arrasa una zona montañosa del suroeste del país.
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El fuego inició el sábado en el condado de Muli, en la provincia de Sichuan, por lo que fue necesario el despliegue de cerca de 700 socorristas.
En un comunicado, el ministerio de Situaciones de Emergencia informó que los servicios de emergencia encontraron los cuerpos de al menos 30 bomberos, con quienes se había perdido contacto después de un repentino cambio de la dirección del viento.
Dicha condición provocó "una gigantesca bola de fuego", precisó el ministerio.
Asimismo, el ministerio precisó que el presidente chino, Xi Jinping, envió "instrucciones importantes" a las fuerzas de seguridad y servicios de rescate.
Riesgo de incendios
Otro incendio forestal que duró dos días en la provincia de Shanxi (norte) fue controlado el domingo, informó la agencia de noticias Xinhua.
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Más de 9 mil personas tuvieron que evacuar sus hogares debido al desastre, que afortunadamente no dejó víctimas.
El fuego forzó el cierre de nueve minas de carbón y otras tantas fábricas de productos químicos, como medida de seguridad.
Los explosivos almacenados fueron trasladados a lugares seguros.
Los rescatistas trazaron un cortafuegos de alrededor de 40 kilómetros y emplearon máquinas excavadoras para despejar un segundo tramo de seis kilómetros, detalló el subcomandante de bomberos del distrito, Wang Yanfeng.
Por otro lado, cerca de 3 mil bomberos extinguieron el domingo otro incendio forestal en los suburbios de Pekín.
Este se desató el sábado y devastó 42 hectáreas de vegetación.
El Centro Meteorológico Nacional de China advirtió sobre un mayor riesgo de incendios en el norte del país, debido a las altas temperaturas y menos precipitaciones en comparación con los últimos años.
*Con información de AFP
