Del templo de Santo Domingo, este Viernes Santo nuevamente se procesionan la Consagrada Imagen del Cristo del Amor y la Consagrada Imagen de Nuestra Señora de la Soledad.
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El escuadrón de Caballeros y los pasos abrirán el recorrido piadoso del Señor Sepultado, en los cuales nos muestran las 14 estaciones del viacrucis.
Además, la representación de ese camino al Gólgota conducirá hacia el anda del Cristo del Amor, que recorrerá las calles desde las 14:30 horas.
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Puntos de referencia
- Catedral Metropolitana: 17:30 horas
- Santa Catalina: 18:30 horas
- Santuario de Guadalupe: 19:10 horas
- San Sebastián: 21:00 horas
- Candelaria: 23:15 horas
- La Merced: 0:20 horas
- Ingreso: 1:30 horas
La alegoría
Para este Viernes Santo, el mensaje es el siguiente:
“Nadie me quita la vida, Yo la doy libremente”, del evangelio según San Juan 10, 17-18.
Y se complementa con un conjunto ornamental que representa el interior de un coro, en estilo gótico.
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Esta estampa recuerda la época más oscura de la Iglesia católica en la cual surgen órdenes de luz, entre ellas la Orden de los dominicos.
Además, abren el conjunto las Tablas de la Ley y le siguen cuatro fuentes de luz que representan los dones de la vida: agua, fuego, aire y tierra.
Y estas están acompañadas de la representación de los primeros cristianos, los 10 apóstoles mártires; símbolo de entrega y fidelidad al amor de Cristo.
Al centro, sobre un puente ricamente decorado, descansa la sesquicentenaria urna que porta a “Cristo del Amor”.
Además, en la parte posterior, sobre una sillería destaca un monumento que representa a la Iglesia.
"Él mismo es un sacramento de la salvación, porque lleva reconciliación, a través de su sangre, esto es una alianza definitiva, esperanza en la gloria y unión íntima entre Dios y todos su hijos en un solo pueblo y una sola carne", indica Fray Luis Roberto Aguilar Leal OP.
Finalmente, en la última parte se integra un águila real, y una pluma que descansa sobre un libro antiguo.
Y por último, cerrando así el conjunto en alusión al Evangelio de los signos, el Evangelio de San Juan.
