De los 158 diputados que lograron una curul hace cuatro años, 90 intentarán ser reelectos el próximo domingo; sin embargo, varios de ellos han dejado sus labores legislativas para dedicarse a sus actividades personales o a la campaña para ganar de nuevo el voto en sus distritos.
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El informe elaborado por la Alianza por un Congreso Eficiente, que analizó el desempeño de los legisladores en el primer semestre, observó una disminución laboral por la interpelación al ministro de Desarrollo Social, Carlos Velásquez, así como el juicio político contra el titular de Comunicaciones, que eran cancelados horas antes de empezar.
En el primer periodo ordinario del Legislativo, en el que se realizaron 40 sesiones, los diputados más faltistas fueron Johnatán Abel Cardona Arreaga, del Frente de Convergencia Nacional-Nación, que presentó 20 excusas; María Stella Alonzo, independiente, envió 23 permisos; mientras que Óscar Argueta Mayén y Thelma Ramírez Retana, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), tuvieron 23 y 21 excusas, respectivamente.
Por lo que 16 congresistas no participaron en el 50% de las sesiones y solo seis asistieron a todas.
Bajo compromiso
Las diferentes organizaciones civiles supervisaron el trabajo de cinco comisiones de las 38 que funcionan, en las cuales en cuatro sesiones de esas salas de trabajo no alcanzaron el cuórum mínimo del 25%, como se establece en la Ley Orgánica del Organismo Legislativo; en 11 sesiones se logró la mitad de la participación de los integrantes y en 18 de las reuniones estuvo la mitad más uno de los diputados.
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Poco consenso para agendas legislativas
De enero a mayo, que es el periodo ordinario, los jefes de bloque no lograron consensos para la discusión y aprobación de leyes, por lo que solo se aprobaron cuatro decretos, entre ellos dos préstamos, una reforma al presupuesto general y la Ley de Reactivación del sector del café, en la que se permite la devolución del crédito fiscal para los contribuyentes con Facturas Electrónicas en Línea. El entrampamiento en el Congreso se debió a intentar las reformas a la Ley de Reconciliación Nacional y la aprobación de la iniciativa de la “protección a la vida y a la familia”.
“Implementar medidas drásticas”, análisis de Walter Menchú, del CIEN
En primer lugar se debe hacer presión para asistir a las sesiones, pues hasta ahora no hay relevancia sobre su trabajo. Debería de haber una reforma a la Ley Orgánica del Organismo Legislativo con sanciones drásticas, que si faltan a cierto porcentaje de sesiones, no reciban su sueldo completo, ya que ahora se les permite presentar excusas hasta un mes después y todas son válidas. También hay malas prácticas, como que solo marcan y se retiran a los cinco minutos para romper cuórum.
