Autoridades informaron que durante las diligencias de allanamiento que se realizan en la Granja Penal Cantel, en Quetzaltenango, se encontró a uno de los reos fallecido.
El privado de libertad presentaba señales de violencia y se encontraba en el interior de una celda del área conocida como “el Hospitalito”.
La Policía Nacional Civil (PNC) y el Ministerio Público (MP) inspeccionan este jueves esa prisión en seguimiento a investigaciones por casos de extorsión.
El vocero policial, Jorge Aguilar, indicó que se tienen indicios de que algunos de los internos podrían estar relacionados con la exigencia de pagos ilegales a transportistas del sector, bajo el concepto de “bono 14”.
Las fuerzas de seguridad buscan indicios que permitan coadyuvar en las pesquisas y deducir responsabilidades.
De forma simultánea a este operativo se realizan por lo menos siete diligencias de allanamiento en diferentes puntos del departamento de Quetzaltenango.
El hallazgo
Antes de que se iniciara el operativo de inspección, uno de los guardias del Sistema Penitenciario se acercó a un fiscal del MP para informarle sobre el hallazgo de un cadáver.
Inicialmente se informó que estaba en un área de aislamiento, pero cuando se verificó la situación, esto fue descartado.
Sin embargo, en el momento en que los agentes ingresaron a los diferentes sectores de la prisión en busca de posibles ilícitos, constataron que había un privado de libertad fallecido en la celda 1 de “el hospitalito”.
Se confirmó que se trata de Luis Guillermo Jiménez Yoc, de 20 años, quien tenía una especie de torniquete en la región del cuello.
Preliminarmente se indicó que se habría generado una riña, en el marco de la cual sus compañeros de celda le habrían dado muerte.
Aunque el caso se encuentra bajo investigación y el MP ya recabó las evidencias correspondientes para establecer lo ocurrido.
Jiménez Yoc había sido trasladado recientemente del Centro Preventivo para Hombres hacia la Granja Penal Cantel, sindicado del delito de asesinato.