El vicepresidente Jafeth Cabrera confirmó este jueves que la compra de aviones Pampa III por parte del Gobierno de Guatemala quedó “sin materia” por recomendación de la Contraloría General de Cuentas.
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El ente fiscalizador emitió ayer un pronunciamiento tras analizar el informe que el Ministerio de la Defensa le remitió con relación al proceso de adquisición.
En este se hacía la recomendación al Ejército para que se desistiera de inmediato de ese procedimiento y se solicitaba que la transacción se hiciera con base en el cumplimiento del marco jurídico vigente.
Ante esta situación, Cabrera aseguró que “si hay algún impedimento, pues sencillamente ya no prosigue el proceso”.
Respecto a la posible penalización que le correspondería pagar a Guatemala por el incumplimiento del acuerdo firmado con Argentina, Cabrera no cree que haya que pagar algún tipo de sanción.
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Esto tomando en cuenta que, según él, solo fue una plática que tuvo el presidente Jimmy Morales, mientras que todavía estaba pendiente analizar jurídicamente el proceso para determinar si se comprarían las aeronaves.
“Eso fue lo que yo les dije desde el principio, que el presidente había ido a una visita y que estaba en un proceso de ver si se podían comprar unos aviones (…) o sea que después de que pasara todo el proceso jurídico, se iba a ver si sería posible la compra o no”.
Sin embargo, aseguró que ya la Contraloría se manifestó de esa manera, entonces si hay algún impedimento, pues ya no se llevará a cabo. “Nunca se compraron como yo se los dije”, afirmó.
Responde a señalamientos
Cabrera también lamentó que hayan surgido inconformidades en la ciudadanía y ciertas organizaciones por la inversión de fondos públicos en este tipo de compras.
A su criterio, es triste que en un país como Guatemala no se quiera mejorar, porque los Pampa III servirían para combatir el narcotráfico, y por lo tanto, de esa manera se fortalecerían los procesos económicos nacionales.
“Todo mundo se opone a cosas positivas y por eso el país está cómo está”, concluyó el vicemandatario Cabrera.