La exprimera dama de Honduras, Rosa Elena Bonilla, fue sentenciada este miércoles a 58 años de prisión.
El tribunal anticorrupción la encontró culpable de:
- fraude
- apropiación indebida de fondos públicos
Estos delitos los cometió durante el gobierno de su esposo, Porfirio Lobo (2010-2014).
Bonilla, de 52 años, fue declarada culpable de los delitos el pasado 20 de agosto. Según la normativa hondureña, la defensa de la exprimera dama tiene 20 días para apelar la sentencia.
La investigación
Bonilla fue detenida el 28 de febrero de 2018 y desde entonces está presa en una cárcel de mujeres en Támara, 10 km al norte de Tegucigalpa.
La fiscalía, con la colaboración de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), adscrita a la OEA, acusó a la exprimera dama de desviar el equivalente a 510.000 dólares de fondos públicos cinco días antes de que Lobo entregara el poder, el 27 de enero de 2014.
Además, Bonilla estaba presa en una cárcel de mujeres en Támara. Esto es 10 km al norte de Tegucigalpa. Fue capturada desde el 28 de febrero de 2018, cuando fue detenida por la policía en su residencia.
Culpa a Juan Orlando Hernández
Lobo acusa públicamente al actual presidente Juan Orlando Hernández de inducir a los juzgados a condenar a su esposa.
Hernández y Lobo pertenecen al Partido Nacional (PN, derecha) pero están enfrentados después de que el expresidente criticó la gestión del actual gobernante y lo instó a renunciar.
*Con información de AFP.