El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitó la frontera sur de su país en el marco de la verificación de las medidas implementadas por su gobierno para detener la migración irregular.
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Por medio de un comunicado, la embajada de Estados Unidos en Guatemala dio a conocer detalles de su visita.
Informó que Trump brindó unas palabras en las cuales resaltó:
“Quiero agradecerle… a Honduras, Guatemala y El Salvador. Los líderes de esos países realmente han estado trabajando fuertemente con nosotros”, expresó el gobernante.
Añadió que se han dado alianzas entre EE. UU. y los gobiernos de la región para alcanzar el objetivo común de reducir la migración y atender la crisis humanitaria y de seguridad.
En ese sentido, la embajada recordó que México ha desplegado a más de 27 mil soldados para patrullar sus fronteras y “está rechazando a los migrantes que intentan entrar de manera ilegal”.
Refirió que la nación norteamericana también ha firmado una serie de acuerdos con Guatemala, incluyendo el Acuerdo de Cooperación de Asilo (ACA), y que se están discutiendo nuevos acuerdos con Honduras y El Salvador.
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Acerca del ACA señaló que al entrar en vigor permitirá que EE. UU. traslade en Guatemala a ciudadanos de terceros países que solicitan asilo u otras formas de protección en EE. UU.
La sede diplomática expuso que el ACA será para que a los migrantes “se les adjudique su asilo u otras formas de protección” en el país centroamericano.
Asimismo, indicó que Estados Unidos ha trabajado con los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador para agilizar el proceso de deportación de inmigrantes ilegales procedentes de esos países.
Acciones contra la migración
El viaje de Trump a la frontera entre México y Estados Unidos realizado esta semana tuvo como objetivo destacar el “gran avance” de su país en la construcción del muro fronterizo con el que se busca frenar la migración ilegal y el narcotráfico.
“El sistema del muro es parte de una serie de medidas de seguridad, políticas de asilo, e iniciativas regionales que han hecho que la entrada ilegal a EE. UU. sea más difícil que en cualquier otro momento de la historia”, cita el comunicado de la embajada.
A las barreras físicas que están siendo edificadas se suman las acciones que la nación norteamericana ha implementado con mayor énfasis y que han permitido un incremento en la detención y deportación de migrantes.
Esto se refleja en las cifras, incluida la de 811 mil extranjeros detenidos en la frontera sur de EE. UU., de acuerdo con datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
En tanto, el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) ha retornado a más de 250 mil personas y ha detectado cientos de casos de “fraude familiar” y contrabando de niños.