Cinco de los seis turistas extranjeros detenidos el domingo por causar destrozos en la centenaria ciudadela inca de Machu Picchu, en Perú, serán deportados a Bolivia, y el otro restante deberá quedarse en el país para ser juzgado, informaron autoridades este miércoles.
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"Tenemos la orden. El día de hoy se va hacer la ejecución de expulsión de los cinco turistas extranjeros", dijo el teniente Edward Delgado, oficial de la policía de Cusco (antigua capital del Imperio inca), donde desde el martes permanecen los detenidos.
"Vamos a trasladarlos por carretera a la ciudad de Desaguadero, en la frontera con Bolivia (en el lago Titicaca), donde podrán hacer las actividades que mejor les parezcan o regresar a sus países" respectivos, agregó Delgado.
El oficial explicó que se decidió llevar a los cinco turistas a Desaguadero, en el extremo sureste de Perú, por ser el paso fronterizo más próximo a Cusco.
Delgado señaló que el vehículo policial con los cinco turistas saldrá del Cusco hacia la frontera boliviana este miércoles en la noche.
El trayecto por esas empinadas carreteras andinas toma unas nueve horas.
Detenidos
El domingo, la policía peruana detuvo en una zona restringida de Machu Picchu al argentino Nahuel Gómez, de 28 años; a su compatriota Leandro Sactiva, de 32; a la francesa Marion Lucie Martínez, de 26; al chileno Favián Eduardo Vera, de 30; y a los brasileños Cristiano Da Silva Ribeiro, de 30, y Magdalena Abril, de 20.
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Gómez admitió ante las autoridades que él había sido quien extrajo una piedra de un muro, la cual, al caer desde una altura de "seis metros", provocó una "hendidura en el piso" del famoso Templo del Sol, informó la policía.
El argentino fue liberado el martes, tras pagar unos 910 dólares de fianza, pero deberá permanecer en el pueblo de Machu Picchu mientras avanza el proceso en su contra por "extracción (remoción) ilegal" de bienes culturales, con lo que arriesga una condena de cuatro años de prisión.
Gómez deberá estampar firma cada diez días en el juzgado local y presentarse cada vez que sea convocado en el marco del proceso penal.
Según las autoridades, los seis turistas ingresaron el sábado subrepticiamente (sin registrarse ni pagar las entradas) a la ciudadela y se ocultaron para quedarse durante la noche en su interior, lo que está prohibido.
Los seis fueron sorprendidos y detenidos al día siguiente dentro del Templo del Sol, cuyo acceso está restringido para favorecer su conservación.
"No fue intencional"
A Gómez también se le atribuye haber defecado en ese recinto sagrado.
"Él ha reconocido que no fue intencional, que solo se apoyó en el muro" (algo que también está prohibido), dijo una fuente de la fiscalía.
Machu Picchu está sobre la cima de una montaña de 2 mil 400 metros en el sureste de Perú.
Debido a la espesa vegetación que le rodea, no se ve desde el llano.
La Unesco declaró la ciudadela Patrimonio de la Humanidad en 1983, y en 2007 fue elegida como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.
Es visitada por unos 5 mil turistas cada día.
*Con información de AFP
