Cientos de emigrantes hondureños que salieron en caravana rumbo hacia Estados Unidos esperan cruzar el puente internacional Rodolfo Robles, ubicado sobre el río Suchiate, entre Ciudad Hidalgo, en Chiapas, México, y Tecún Umán, en San Marcos.
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Lo harán en grupos, los cuales se organizaron mientras esperaban en la Casa del Migrante y lugares aledaños.
La idea es hacer una sola fuerza para evitar ser retenidos por las autoridades mexicanas.
- “Le pedimos a Dios que nos ayude en el camino para poder entrar a Estados Unidos”, dijo Ever Ortiz, quien viaja con su esposa, sus dos hijos y su cuñada.
Todos se unieron a la caravana de hondureños que salió de San Pedro Sula la noche del 14 de enero.
El sueño de esta familia es mejorar la “dura situación con la que vivían en su país”, según indicó.
Las autoridades mexicanas indicaron a los emigrantes que solo se les permitirá el paso con “orden y respeto” y mediante “ingreso controlado”.
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Una sola caravana
Los hondureños fueron quienes salieron en caravana de sus país. Sin embargo, en el camino se les han unido salvadoreños, nicaragüenses y guatemaltecos.
De acuerdo con el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), entre el 15 y el 16 de enero ingresaron al país cuatro mil seis hondureños, aunque 400 solicitaron retornar voluntariamente.
Se indicó que cerca de un millar de personas tomó el camino hacia la frontera El Ceibo, en Petén, y el resto hacia Tecún Umán.
En este último paso fronterizo ya salieron 881 personas, entre ellas 19 salvadoreños, tres nicaragüenses y 38 guatemaltecos.
Advertencia de EE.UU.
El embajador de los Estados Unidos en Guatemala, Luis Arreaga, advirtió a quienes viajan en la caravana de emigrantes:
- “Les insto a buscar su futuro en su propio país y con su propia familia. No arriesgue su vida y la de sus parientes en un intento de migrar que fracasará”.
Según se informó, las autoridades de Guatemala, México y EE. UU. han reforzado sus controles fronterizos y quienes intenten hacerlo serán “detenidos y retornados” a sus países.
Asimismo, se les ha recordado que no podrán solicitar asilo en la nación norteamericana.
Solidaridad con los emigrantes
En la Casa del Migrante, en sus tres sedes ubicadas en Chiquimula, en la zona 1 capitalina y en Tecún Umán, es donde se ha acogido a los centroamericanos que buscan alcanzar el “sueños americano”.
Quienes están al frente de estos refugios los han recibido con agua, comida, ropa, medicinas y hasta con atención psicológica.
Por su parte, los delegados de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) han verificado la situación y las condiciones de las personas que viajan en la caravana.
Dicha entidad ha informado que las autoridades municipales no han apoyado a quienes están en tránsito hacia Estados Unidos.