Al menos 35 personas murieron y más de mil 600 resultaron heridas en el fuerte terremoto que azotó el viernes las provincias de Elazig y Malatya, en el este de Turquía, según un nuevo balance difundido el domingo por la agencia presidencial para emergencias y catástrofes (AFAD).
El balance anterior era de 29 muertos.
Un centenar de personas permanecen hospitalizadas, 13 de ellas en estado grave.
El sismo de magnitud 6.7, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), cuyo epicentro se situó en la provincia de Elazig, ocurrió a las 17:55 (hora GMT) del viernes.
Unos 80 edificios en Elazig Malatya y otras 645 viviendas sufrieron daños importantes durante el terremoto, indicó una fuente.
Sigue búsqueda de sobrevivientes
En tanto, los socorristas continuaban buscando sobrevivientes en medio de los escombros en el centro de la ciudad de Elazig, capital de la provincia homónima.
Desde el viernes, los cuerpos de emergencia habían logrado rescatar con vida a 45 personas que quedaron atrapadas en los edificios derrumbados, afirmó la AFAD.
En Sürsürü, un barrio de la ciudad de Elazig, ubicada no muy lejos del epicentro del sismo, se hallaron tres cuerpos sin vida entre los escombros de un inmueble residencial que se desplomó.
Cerca del edificio, decenas de personas esperaban ansiosas noticias de sus familiares.
"Es difícil, pero hay que tener paciencia", le decía una voluntaria de la Medialuna Roja a una mujer, desesperada por saber si su prima, vecina del inmueble, estaba viva o no.
"Las personas atrapadas ahí debajo están luchando, hay que ser fuerte".
Sin embargo, más de 36 horas después del sismo, y con temperaturas inferiores a los -10 ºC por la noche, la esperanza de encontrar sobrevivientes era cada vez más baja.
Los socorristas laboran contrarreloj, pero tenían que proceder con precaución para evitar más derrumbes.
Además, los habitantes continúan con miedo a las réplicas, ya que desde el viernes se han producido más de 600.
*Con información de AFP