Autoridades de Alemania intentaban aclarar el martes los motivos del hombre que atropelló a decenas de personas durante un desfile de carnaval en la ciudad de Volkmarsen, dejando cerca de 60 heridos.
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Según la fiscalía de Fráncfort, que abrió una investigación por "tentativa de asesinato", el conductor, un alemán de 29 años, no estaba bajo los efectos del alcohol cuando ocurrió el atropello.
No descartó, en cambio, que el individuo haya actuado bajo influencia de las drogas.
En declaraciones a la televisión RTL, un supuesto vecino del sospechoso relató haberlo visto partir antes del atropello. "Lo vi arrancar (en su vehículo), parecía drogado, y dijo: 'pronto saldré en los periódicos'", aseguró.
Las autoridades no podían determinar el martes con certeza si el individuo actuó de forma intencional o no.
La fiscalía anunció haber detenido el martes a una segunda persona, que grabó los hechos, sin precisar si estaba o no relacionada con el conductor.
Niños heridos
El jefe del Estado, Frank-Walter Steinmeier, dijo sentirse "profundamente afectado" por el incidente y deseó una pronto recuperación a las víctimas.
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Según la policía, 35 personas, siguen hospitalizadas, varias en estado grave.
"Hay 18 niños entre las víctimas", dijo la policía de la región de Hesse.
Testigos interrogados por el diario Frankfurter Rundschau tuvieron la impresión de que el sospechoso tenía como objetivo especial los menores, tras haber embestido a toda velocidad contra la muchedumbre.
La fiscalía antiterrorista no se ocupa por ahora del caso, señal de que las autoridades no privilegian la hipótesis de un atentado.
El detenido tampoco está fichado como extremista, indicó una fuente de los servicios de seguridad, pero sí era conocido por casos de insultos e intrusión, según la prensa alemana.
Desfiles autorizados
El incidente tuvo lugar en un contexto tenso en Alemania, en particular en el estado de Hesse, donde la semana pasada un extremista mató a nueve personas en dos ataques racistas en la localidad de Hanau.
El gobierno alemán también se mantiene en alerta ante las amenazas de grupos islamistas extremistas y de terroristas de extrema derecha.
En tanto, las regiones católicas del oeste y el sur de Alemania celebraban el carnaval, una cita anual de disfraces muy popular.
El lunes, la policía había anunciado por "medida de precaución" la anulación de todos los desfiles en el Estado de Hesse, pero este martes el ministerio del Interior de este Land dio luz verde para que los desfiles aún previstos se celebraran.
*Con información de AFP
