En conferencia de prensa, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, confirmó que el tiroteo perpetrado el fin de semana en la provincia de Nueva Escocia dejó 18 personas muertas, convirtiéndose en la peor matanza en la historia del país norteamericano.
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"El tirador se cobró la vida de al menos 18 personas, entre ellas una mujer en uniforme cuyo trabajo es proteger vidas, incluso si ello pone en peligro la suya propia", señaló Trudeau.
"¿Cómo pudo ocurrir esto? Podríamos no saberlo nunca", declaró. "Pero sí sabemos esto: ninguna acción de un hombre puede levantar una pared entre nosotros y un día mejor, no importa lo malvado, insensato y destructivo (que sea)", afirmó.
El incidente inició a última hora del sábado en la pequeña localidad de Portapique, a un centenar de kilómetros de la capital provincial Halifax.
Numerosos cuerpos fueron hallados enfrente y dentro de una vivienda a la cual acudió la policía tras recibir avisos de disparos.
Larga persecución
El supuesto tirador, identificado como Gabriel Wortman, de 51 años, huyó tras percatarse de la llegada de las autoridades, lo que desencadenó una amplia búsqueda que duró alrededor de 12 horas.
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Wortman fue abatido durante su arresto la mañana del domingo.
"La búsqueda del sospechoso terminó esta mañana. Cuando el sospechoso fue ubicado. Y puedo confirmar que ha fallecido", indicó Chris Leather, responsable de investigaciones criminales de la GRC de Nueva Escocia.
Tras anunciarse la cifra oficial de fallecidos, se confirma que se trata del tiroteo más letal en la historia de Canadá.
El 6 de diciembre de 1989, un hombre mató a balazos a 14 mujeres en la escuela politécnica de Montreal antes de suicidarse.
El 23 de abril de 2018, en Toronto, el conductor de una furgoneta mató a ocho mujeres y dos hombres tras atropellarlos intencionadamente en una acera del centro de la ciudad.