La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) realizó una verificación en el hospital Roosevelt y constató que algunos de los pacientes con Covid-19 que son tratados en el lugar se encuentran en carpas.
Actualmente son 75 pacientes con coronavirus los que están internados en el referido centro asistencial, 20 de ellos fueron colocados en los espacios improvisados en un área del parqueo afuera de la emergencia de adultos.
“Se encuentran a la intemperie, en carpas, expuestos a condiciones climáticas como lluvia y frío”, resaltó Zulma Calderón, defensora de la Salud de la PDH.
Asimismo, determinó que en ese lugar hay personas con enfermedades renales, VIH y mayores de edad. Algunas procedentes del interior del país y otras que fueron referidos de servicios de salud de la capital.
Tras una visita anoche, la defensora estableció que en las carpas brindan atención cuatro personas de enfermería, mientras que 11 médicos apoyan en esa área y en la emergencia.
A su criterio, ese escenario evidencia el colapso de la red hospitalaria, por lo que pidió la intervención urgente del Ministerio de Salud para tomar medidas y reforzar la atención a los guatemaltecos.
Situación “catastrófica”
Napoleón Méndez, jefe de la sección quirúrgica de la emergencia de Adultos del hospital general San Juan de Dios, calificó como una situación catastrófica lo que se vive en ese centro debido a que se ha visto rebasado en su capacidad.
“Tenemos una situación catastrófica, un caos de sistema, no solo por el Covid-19, sino que por el resto de patologías, porque la ocupación del hospital ha tenido que dividirse en dos”, refirió.
Señaló que los médicos, técnicos y enfermeras se encargan de la atención de infectados o sospechosos con Covid-19 y el resto de la población que asiste por otros padecimientos, que muestra una alta demanda.
El escenario que describió es de personas incluso en el piso o en sillas, pues las camillas ya no son suficientes para los hospitalizados.
Actualmente en ese centro asistencial se tiene a más de 80 personas, entre casos confirmados y sospechosos de coronavirus, en un área habilitada para no más de 20 personas.
Lo ideal es que se tenga un distanciamiento de entre 1.5 o 2 metros entre cada paciente, dijo; sin embargo, esto no es posible, pues los hospitales habilitados para casos de Covid-19 ya no tienen capacidad para recibir a más personas, por lo que se han quedado en el lugar.
De acuerdo con el médico, también observan problemas por la falta de oxígeno, ya que más de 60 personas necesitan asistencia respiratoria, entre las que figuran ocho en estado grave, pero la capacidad del hospital está siendo rebasada.
“Nos da mucho temor lo que le pueda pasar a la población porque los hospitales nacionales están desbordados”, resaltó Méndez.
El médico aseguró que tanto él como sus compañeros están dispuestos a atender a pacientes con coronavirus, pues están al servicio de la población, pero se les complica la labor si no cuentan con los espacios y equipos necesarios.
Además, dio a conocer que se han comunicado con autoridades del Ministerio de Salud para informarles sobre la situación, por lo que anoche el viceministro de Hospitales hizo una verificación en el área.
También han hecho planteamientos ante la PDH para que le dé seguimiento a la situación, aseguró.
Hospitales Covid-19 “de facto”
La diputada Lucrecia Hernández Mack, de la bancada Semilla, se pronunció sobre la situación en el Roosevelt y San Juan de Dios e indicó ya “de facto” son hospitales Covid-19.
Por medio de su cuenta en la red social Twitter, la parlamentaria dijo que en esos centros asistenciales se atienden muchos pacientes infectados por coronavirus, sin poder referirlos a Villa Nueva ni al Parque de la Industria.
“Autoridades del Ministerio de Salud deben coordinar más allá de su red de servicios”, destacó.
Asimismo, compartió una carta en la que médicos del hospital general San Juan de Dios exponen la situación que se da, pues su capacidad de atención ha sido rebasada.