El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este lunes que no se realizará la prueba para detectar el nuevo coronavirus (COVID-19) pues goza de buena salud y no presenta síntomas.
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El mandatario habló tras confirmarse que el director Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, dio positivo por COVID-19.
Robledo reveló el domingo, vía Twitter, los resultados de su prueba, y anunció que ya se mantiene en vigilancia epidemiológica a sus contactos.
"No me hago la prueba porque no tengo los síntomas. Afortunadamente estoy bien y me cuido", dijo López Obrador en su habitual conferencia de prensa matutina, a la que regularmente asiste Robledo.
Tras reanudar la semana pasada sus giras por el país para supervisar obras públicas, el gobernante mexicano dijo que "ningún" integrante de su equipo de trabajo ha presentado problemas de salud relacionados con la pandemia.
"No ha habido ningún problema en presidencia, (entre) los que están más cerca, se guarda la distancia".
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México, segundo país más afectado de la región
López Obrador, quien se ha caracterizado por mantener un contacto físico con cualquiera que se le acerque, dijo que le "afecta muchísimo" abstenerse de abrazar y dar muestras de afecto a la gente, pero que entiende que es parte de la "nueva normalidad".
México, con 127 millones de habitantes, es el segundo país después de Brasil con más decesos en América Latina.
La Secretaría de Salud reportó el domingo 3 mil 484 nuevos casos positivos de coronavirus y 188 nuevas muertes, lo que llevó la cifra de contagios a 117 mil 103, y la de fallecidos a 13 mil 699, según el balance oficial.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y políticos opositores sostienen que México no aplica suficientes pruebas.
El domingo, la cifra total de muertos por COVID-19 rebasó la barrera de los 400 mil, y la de infectados la de los 7 millones.
*Con información de AFP