Delegados de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y el diputado Aldo Dávila, del bloque Winaq, realizaron una verificación en el hogar para menores Zafiro 1, donde se detectaron casos de Covid-19.
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El centro está a cargo de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) y alberga a niñas y adolescentes que son parte de programas de protección de la institución.
Dávila detalló que en el lugar se constató que nueve menores y dos educadoras tienen coronavirus, y señaló retrasos en que se les notificara sobre el diagnóstico.
“Pasaron casi nueve días sin los resultados de los hisopados que se les practicaron”, expuso en sus redes sociales.
Mientras tanto, la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de la PDH hizo una serie de hallazgos, dentro de los cuales destacó el hacinamiento.
En un informe emitido por la institución se detalló que en el hogar no se está garantizando el distanciamiento físico entre las adolescentes.
Además, que las internas no tienen acompañamiento psicosocial y que se cuenta con poco personal para atenderlas.
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La entidad añadió que se han aplazado las audiencias en el organismo Judicial, provocando que algunas de las menores no hayan sido reintegradas con sus familias.
Y que no se han practicado pruebas de Covid-19 a todas las adolescentes.
Recomendaciones
Después de la observación en el hogar Zafiro 1, la PDH hizo recomendaciones a la Secretaría de Bienestar Social, entre estas:
- Que de forma inmediata se garantice el distanciamiento físico entre las adolescentes, por lo que el hogar debería ser ocupado por un máximo de diez de ellas.
- Gestionar con el Ministerio de Salud la realización de test al resto de las internas.
- Garantizar la salud de las adolescentes que no tienen la enfermedad, trasladándolas a otra residencia que reúna las condiciones necesarias.
- Garantizar atención psicosocial a las menores y al personal a su cargo.
- Proveer del equipo de protección necesario a los trabajadores del lugar.
