El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, ingresado en un hospital tras contagiarse de coronavirus (COVID-19), hizo el domingo un llamado a la población a unirse para frenar la pandemia.
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"Desde la cama de un hospital les digo que esta guerra la ganamos unidos y sin descanso, apoyando con nuestro cuidado personal a los médicos y a todo el personal de salud, que son los que están en primerísima línea", dijo el gobernante, con voz pausada, por medio de un audio difundido por la Casa Presidencial de Honduras.
Hernández anunció la semana pasada que tanto él como su esposa, la primera dama Ana García habían dado positivo a la prueba de COVID-19.
Un día después, el gobierno hondureño informó que el mandatario había tenido que ser internado en el hospital militar de Tegucigalpa.
"Estamos luchando con todo para sobrepasar este duro momento, quizá el más difícil que nuestro país haya tenido que enfrentar en los últimos cien años", advirtió el gobernante.
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"Nos duele profundamente cada familia que pierde a diario a un ser querido frente al COVID-19. No hay palabras que puedan describir el dolor que sufren, ni dar tranquilidad al compatriota que hoy está enfermo, sufriendo", declaró.
Amplían toque de queda
La difusión del audio de Hernández coincidió con el anuncio del gobierno, la noche del domingo, sobre la ampliación del toque de queda, establecido desde el 16 de marzo.
Honduras empezó, a partir del pasado 8 de junio, una reapertura progresiva con al menos el 20 % de los empleados de una veintena de oficinas públicas, así como en fábricas y negocios, que aumentaron los contagios.
Con una población de 9.3 millones de personas, Honduras registra oficialmente 12 mil 759 casos de COVID-19 y 363 muertos.
Las autoridades hondureñas, no obstante, admiten que es un subregistro, porque hacen muy pocas pruebas y los resultados que dan son de hasta 15 días atrás.
*Con información de AFP
