Continúa la discusión por varios sectores en torno a la implementación del sistema de alertas que funcionará para medir la situación del Covid-19 en cada región del país.
PUBLICIDAD
Dicho sistema, que es muy parecido a un semáforo, fue anunciado por el presidente Alejandro Giammattei hace unas semanas.
Para dicho efecto, fueron invitados al programa “A Primera Hora” de Emisoras Unidas Karin Slowing Umaña, médico y cirujana con una maestría en Salud Pública, y Jorge Benavides, director ejecutivo del Consejo Privado de Competitividad.
Entrevista
- “¿Cómo ve este sistema, desde la perspectiva económica?”
Esta fue una pregunta que se le realizó a Karin Slowing por parte de los periodistas Marielos Fuentes y Luis Felipe Valenzuela, a lo que ella contestó:
“Yo pienso que el semáforo es una herramienta de trabajo para monitoreo. Creo que el semáforo en sí no debería ser el tema de discusión, sino cómo hace para romper la cadena de producción del virus y cómo hace para evitar que se muera la gente.”
De acuerdo con la profesional, para contar con ese monitoreo se requiere de dos cosas fundamentales que no se están haciendo: establecer un sistema de monitoreo y una aplicación masiva de pruebas.
PUBLICIDAD
“Como vemos ahorita, la mayor parte de municipios está en rojo. El semáforo no tiene sensibilidad en este momento para guiar una apertura diferenciada de las economías, pero sobre todo para saber dónde está realmente el problema de la transmisión del virus que debería ser la prioridad de Salud Pública, no la economía”, añadió.
Por otra parte, la doctora Slowing indicó que si no se lleva correctamente la detección de casos podría haber rebrotes después.
“Si no tenemos cómo detectar los casos es muy difícil que los criterios de apertura económica se puedan cumplir o bien se cumplirán con datos erróneos. Eso podría generar rebrotes”, aseveró.
“Retomar la cotidianidad”
A criterio de Benavides, estamos ante una herramienta que permite ir viendo cómo van pasando las cosas en relación al Covid-19.
“Lo importante es entender que vinculado con el semáforo van a haber protocolos que se deben ir adaptando y más que por actividad económica, es cómo retomamos la cotidianidad”, dijo.
Por otro lado, según indica el experto, podría haber actividad económica en rojo o en verde, lo que cambia es cómo se daría.
“Lo que se destaca de este semáforo es el reflejo de las distintas realidades tanto en la ciudad como en el interior del país. Por ejemplo, la capacidad de atención primaria en salud”, añade.
Semáforo tiene “talones de Aquiles”
Según la doctora Slowing, esta herramienta tiene varios fallos que podrían reflejarse en la toma de decisiones.
Una de esas fallas es la debilidad de no poder alimentarnos adecuadamente con la información, como consecuencia, esto podría complicar el escenario.
Por otra parte, también menciona que otro “talón de Aquiles” es que el semáforo si bien monitoreando municipios, también debería haber para las empresas.
“Capacidad de adaptarnos”
Por su parte, Benavides indicó que se debe implementar una mejor forma de comunicación en todo sentido.
“Al final, los mensajes de empresas es, miren, nosotros tenemos la capacidad de adaptarnos, estamos dispuestos a cubrir los costos y realizar todos los protocolos necesarios, simplemente indíquennos qué debemos hacer”, asegura.
Además, asegura que la capacidad de comunicación se debe desarrollar desde el Gobierno y que ahora se tendrá que direccionar a las municipalidades.
