La pandemia del Covid-19, el desempleo, las tensiones raciales y la crisis económica son los temas clave antes de las elecciones del 3 de noviembre en los Estados Unidos, en las que se decidirá quién será el próximo presidente y vicepresidente del país. También se disputarán los 435 escaños de la Cámara de Representantes, 35 de los 100 escaños del Senado, y trece gobernaciones estatales y territoriales.
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Donald Trump busca la reelección para un segundo mandato, mientras que Joe Biden, exvicepresidente de la administración Obama, es el candidato del Partido Demócrata que busca la victoria. Según Justin Levitt, decano adjunto de investigación y profesor de derecho en la Universidad Loyola Marymount, en California, Estados Unidos, hay muchos temas y definitivamente muchas sorpresas por venir. “La pandemia, la economía, los tribunales, el cuidado de la salud, la corrupción, el medioambiente y así sucesivamente (serán temas importantes)”, explicó a Publinews Internacional. “Pero dudo que esta elección se defina por otro tema que no sea la pandemia. Y aún más que eso, el presidente Trump ha hecho toda la elección (como con tantas otras) sobre él: Esta elección probablemente se definirá por la pasión con la que los votantes se identifican con y contra Donald Trump”, añadió. La elección de 2020 será muy diferente a la de 2016, cree el experto.
“La dinámica política es muy diferente, por supuesto: El presidente Trump se presentó como un orgulloso forastero en 2016, pero ahora es el titular. Sin embargo, más que eso, la mecánica de la elección será muy diferente. La pandemia cambiará la forma en que muchos estadounidenses votan y la escala de ese cambio es algo que probablemente pondrá a prueba la resistencia de la propia estructura electoral”, concluyó Levitt.
3 preguntas a…
Inderjeet Parmar, profesor en el Departamento de Política Internacional de la City, University of London
¿Cuáles son los temas clave en los Estados Unidos cien días antes de las elecciones?
El Covid-19 es central en general debido a sus efectos económicos, así como sus efectos raciales desiguales, su enfoque en la crisis de la atención de la salud y el número de casos y muertes, especialmente a medida que se mueve en el corazón de los republicanos. Esto se ve agravado por las protestas contra el racismo y la violencia policial. Esos temas han sacudido las dos principales afirmaciones de Trump de “Hacer que América sea grande de nuevo”; primero, que estaba devolviendo América a los suyos (gente blanca, verdaderos americanos) porque las minorías y los inmigrantes habían tomado el poder -y que el racismo no era un problema-. Ahora la raza es central y barrió la opinión de los estadounidenses en su contra. En segundo lugar, se suponía que iba a construir una gran economía, y la pandemia ha destruido eso. La supresión de votantes y las boletas de voto por correo probablemente también sean importantes, ya que Trump busca restringir la participación de los pobres, los jóvenes y las minorías.
¿Qué tan diferente es la elección de 2020 a la de 2016?
Trump ya no es un extraño, está muy dentro del establecimiento político. Tiene un historial que defender. En el centro de esto estará su competencia e ideología de “America First”. ¿Ha drenado el pantano? No. ¿Dónde están los trabajos de manufactura? ¿Cómo se ve a los EE. UU. en el mundo? Los efectos de una guerra arancelaria con China han golpeado a los agricultores, su principal electorado, su guerra contra los inmigrantes ha visto a los niños separados de sus madres, hay virtuales campos de prisioneros en la frontera, se ha dado poder a los supremacistas blancos, se ha desregulado a las corporaciones de las protecciones ambientales y laborales, la desigualdad ha aumentado y el país está polarizado. Es un intruso que será un líder fuerte sin ataduras por reglas anticuadas e innecesarias, lo que ahora es su mayor debilidad: Se negó y parecía incapaz de unirse y liderar a los estadounidenses en una emergencia nacional mortal.
¿Cuál es la importancia de Trump en la campaña electoral?
Trump es fundamental para la campaña, especialmente su persona, estilo y competencia. Sin embargo, también es presidente 40 años después de que el presidente Reagan declarara que “el gobierno no es la solución al problema, el gobierno es el problema”. Esa idea de la irresponsabilidad gubernamental en favor de la libertad de empresa es también un contexto fundamental para el punto de vista de la administración Trump (“deconstrucción del Estado”). Pero también lo es el “America First” de Trump, el nacionalismo racializado y procorporativo, que ha visto grandes recortes de impuestos para los ricos y recortes en el bienestar social, etc., para la gente común. Su manejo de la pandemia ha sido incompetente, acientífico, políticamente partidario y divisivo en el escenario mundial. La autoridad moral de Estados Unidos se ha desintegrado y sus estrategias coercitivas en el país han destripado las normas y protecciones constitucionales, y dañado el mismo sistema internacional que el país construyó y del que se benefició después de 1945 (Segunda Guerra Mundial).
