El Centro Nacional de Huracanes (NHC) degradó al huracán Hanna a tormenta tropical este domingo, a su paso por Texas, Estados Unidos, donde ha provocado fuertes lluvias y amenazaba con generar inundaciones.
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Hanna golpeó la isla del Padre el sábado y avanzó como huracán categoría uno con vientos de hasta 145 kilómetros por hora, dijo el NHC. Este día, pese a haberse degradado, mantenía vientos de 115 kilómetros por hora.
“Se espera que Hanna produzca fuertes lluvias en partes del sur de Texas y en el noreste de México. Estas lluvias podrían ser amenazantes para la vida por inundaciones repentinas” y el desborde de ríos, dijeron temprano meteorólogos.
Advirtieron, además, sobre una “marejada ciclónica” con olas de unos 1.8 metros en algunas áreas.
Durante la mañana, no obstante, no hubo reportes de pérdidas humanas o grandes daños.
Hanna tocó tierra unos 110 kilómetros al sur de Corpus Christi, una ciudad de más de 325 mil habitantes.
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Llegó a Texas, además, en momentos en que el estado enfrenta una dura situación por el aumento de casos de coronavirus (COVID-19), y luego de que las autoridades anunciaran el uso obligatorio de mascarillas.
Trump monitorea la tormenta
En tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que “sigue de cerca” el avance de la tormenta Hanna y pidió a la población proteger a sus familias.
“Mi administración está vigilando de cerca al huracán Douglas frente a Hawai y al huracán Hanna, que ahora ha tocado tierra en Texas“, escribió el mandatario en Twitter. “Seguimos coordinando estrechamente con ambos estados… escuchando a sus oficiales de atención de emergencias… ¡para proteger a sus familias y propiedades!“, añadió.
Además de Hanna, el huracán Douglas se cernía frente a Hawái en el Pacífico, debilitado a categoría uno con vientos de 145 kilómetros por hora.
Por su parte, la tormenta tropical Gonzalo avanzaba en el Atlántico, cerca de las islas de Barlovento.
*Con información de AFP
