Una agencia de la ONU expresó este viernes su preocupación por los residuos tóxicos generados por las terribles explosiones que devastaron el puerto de Beirut, capital del Líbano, el pasado 4 de agosto, y pidió a las autoridades que se analice su impacto y peligrosidad.

La catástrofe, que dejó más de 171 muertos y alrededor de 6 mil 500 heridos, “cubrió Beirut de capas y capas de residuos” de todo tipo, explicó desde Líbano Rekha Das, consejera de crisis para el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), durante una rueda de prensa por videoconferencia organizada desde Ginebra.

“Debemos analizar los distintos tipos de desechos: los tóxicos, médicos, electrónicos…”, aseguró Das, quien recordó que también se debe cuáles tipos de residuos “son peligrosos y cuáles no; los que se pueden reciclar y los que no, y guardar en lugares seguros aquellos que no se puedan reciclar”.

“La situación es importante porque ya había un problema en este país con la selección de los desechos”, reconoció la responsable de la ONU, citada por AFP.

“Además de estos desechos visibles y de la contaminación, también se contaminó el Mediterráneo, de lo que sabemos poca cosa”, reconoció.

Resultados dentro de una semana

Esta tarea de análisis de los residuos, que “no ha hecho más que empezar”, se realizará “en colaboración estrecha con expertos de la Unión Europea” y “organizaciones de voluntarios”, dijo Das.

La funcionaria reconoció que “resultará difícil llegar a las zonas dañadas”, puesto que aún hay “ladrillos y tejas que caen”, pero que esperan obtener los primeros resultados preliminares “dentro de una semana”.

El PNUD calcula que se necesitarán al menos 3 millones de dólares para financiar estas primeras tareas de análisis de los desechos.

El jueves, expertos de derechos humanos de la ONU pidieron una investigación independiente y rápida sobre las explosiones y expresaron su preocupación por la “impunidad” de la que se benefician, según ellos, los dirigentes libaneses.

*Con información de AFP