- Háblanos sobre la importancia de hacer un mapeo de riesgo y de protección a niñas, niños y adolescentes en Latinoamérica…
En ChildFund creemos que toda la niñez tiene derecho a ser protegida de la violencia, de la explotación y del abuso. Se hizo un mapeo en seis países y 116 comunidades de América Latina, entre ellas 23 de Guatemala. Se ubicaron factores de riesgo en el hogar: la violencia intrafamiliar, el consumo y abuso de alcohol y drogas, la limitada economía y la poca comunicación familiar. En el ámbito escolar: el bullying, la deserción escolar, el bajo nivel educativo y los insuficientes insumos escolares y mobiliario. A nivel comunitario: la violencia física, verbal y sexual, las cantinas, la débil cohesión social y la organización comunitaria. Por otro lado, se identificaron factores de protección, como la guía, la orientación y el apoyo familiar, las muestras de afecto y de motivación a la niñez y a la adolescencia, la alimentación, las ferias y las redes de apoyo.
- Las 23 comunidades de Guatemala están en Alta Verapaz, Chimaltenango, Huehuetenango, Quiché y Sololá, ¿por qué las eligieron?
Elegimos comunidades con tres características: privación de acceso a los bienes, niveles de exclusión históricos y vulnerabilidad, además de que estas localidades participan en nuestros programas y las estamos abordando poco a poco. Se hacen esfuerzos a nivel individual y comunitario. Se escuchan a niñas, niños y adolescentes, queremos saber qué opinan para luego escuchar a los adultos y darles otra perspectiva.
- ¿Cómo quedan esas comunidades con la pandemia del Covid-19?
Tengo una preocupación muy grande porque lo que empezó como una emergencia sanitaria y de salud se ha convertido en una emergencia social y de irrespeto a los derechos de las personas. Por ejemplo: Los servicios de atención primaria en salud que antes eran limitados ahora están más ausentes que nunca. Los cuadros de vacunación se quedaron de lado porque la prioridad es la Covid-19 y la prevención. Está siendo un problema muy serio para la infancia.
- ¿También afectó la educación y se incrementó la violencia?
Las escuelas se cerraron como una medida de prevención, pero la niñez está expuesta a espacios más violentos adentro del hogar. Hay agresiones físicas, psicológicas y verbales de padre y madre hacia las hijas y los hijos y esta se ejerce utilizando las manos: puños, coscorrones, jalones de cabello y orejas, y objetos como cinchos y lazos. Las niñas y los niños comentaron que las razones por las que son “corregidos” son por no hacer caso, por pelearse entre hermanos y hermanas, por no hacer los oficios del hogar y las tareas escolares. La gente adulta tiene altos niveles de estrés por el encierro y por la pérdida del empleo, pues la mayoría está en el sector informal.
- ¿Qué otros tipos de violencia manifestaron?
La violencia en contra de animales que la niñez y adolescencia cuida y aprecia. Nos indicaron que les afecta cuando sus perros, gatos, pollos, patos, ovejas y vacas mueren o son sacrificados o vendidos para la alimentación de la familia. De igual forma, comentaron estar tristes cuando su familia agrede a los animales o a las mascotas o cuando se enferman y, en última instancia, mueren. También dijeron sentirse vulnerables por la ausencia de su padre, madre o familiares cercanos quienes tuvieron que desplazarse a otros lugares del país y migrar en busca de una mejor calidad de vida.
- Se confirma entonces que la pandemia agravó la situación de la niñez…
Sí, pero la situación empeora si agregamos los daños que dejaron las tormentas “Eta” e “Iota” porque hubo quienes perdieron sus cultivos y sus casas, y ahora están en albergues temporales, además del conflicto político-social que vive el país en este momento. La niñez y la adolescencia están muy expuestas y vulnerables.
- ¿Cuál es el llamado a las autoridades?
Primero, asegurar que la niñez tenga comida en la mesa; segundo, que no esté siendo expuesta a los diferentes tipos de violencia y tercero, incentivar la educación. Nosotros ayudamos a las familias a ser sostenibles con pequeños huertos, con espacios para que la crianza de gallinas y animales de patio, los cuales puedan comer, pues son proteína. Apoyamos a gobiernos locales a buscar soluciones creativas e innovadoras que ayuden a la población, pero sabemos que no podemos solucionar el problema. Sería bueno que se retomaran las transferencias monetarias condicionadas.
Municipios en los que están las comunidades consultadas:
- Aguacatán
- Nahualá
- Panzós
- San Bartolomé
- Jocotenango
- Santa Catarina Ixtahuacán
- Tecpán.