Este 16 de septiembre, inició en el Tribunal Noveno de Sentencia Penal el debate contra dos enfermeras del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) por su presunta responsabilidad en la muerte de una bebé en octubre de 2019, a quien le cayó, por un supuesto descuido, una lámpara tipo cuello de ganso que le provocó quemaduras y posteriormente la muerte.
PUBLICIDAD
Mientras que su gemela sobrevivió aunque sufrió grabes quemaduras. Ambas bebés recibían atención médica en el IGSS de Pamplona luego de complicaciones tras su nacimiento.
Inicia juicio
Las acusadas son Cesibel Rivas, acusada de homicidio culposo y Maritza Dieguez Oliva, por incumplimiento de deberes.
Una de las acusadas declaró que la lámpara tipo cuello de ganso es para dar calor a los bebés prematuros y el procedimiento no requiere de una supervisión directa sino que es rutinario.
Además, indicó que no todas las lámparas están en buen estado ya que llevan años funcionando.
También dijo al tribunal que por esta razón fueron despedidas luego de 25 años sin tener derecho a una indemnización.
Pide justicia
La madre de las niñas pidió justicia al tribunal y en medio del llanto dijo que las enfermeras que habían llegado a llorar y echarse la culpa, pero que nadie estaba sintiendo el dolor que ella tiene por la pérdida de Valentina, además del daño psicológico.
PUBLICIDAD
Además, declaró que su hija Isabella debe pasar por varios procedimientos a su corta edad a causa de las quemaduras que sufrió tras caerle la lámpara.
“Nadie sintió lo que mis hijas sintieron y que mi hija Isabella va seguir pasando con tantas cirugías que le tienen que hacer a su corta edad. Estarle haciendo hisopados, injertos de piel, estarla operando, nadie pasa por eso señor juez. Yo sé que ellas deben estar tristes, obviamente, pero nadie está aquí por el dolor que yo siento”, indicó la madre.
Valentina e Isabella recibían atención médica en el IGSS de Pamplona luego de complicaciones tras su nacimiento
* Con información de Samanta Guerrero, Emisoras Unidas 89.7