El Banco Mundial (BM) proveerá 52.5 millones en pagos por reducción de emisiones por deforestación y degradación forestal y aumento de la captura de carbono en los próximo cuatro años, informaron este martes fuentes oficiales.
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El acuerdo de pago por reducción de emisiones (ERPA, en inglés) recompensará esfuerzos para reducir 10,5 millones de toneladas de emisiones de carbono hasta 2025, dijo el representante del BM en el país, Marco Scuriatti, quien firmó el convenio con el presidente Alejandro Giammattei.
“Este programa requerirá la participación de diversos actores del gobierno, la sociedad civil, el sector privado, comunidades locales y pueblos indígenas, y beneficiará a todos al ayudar en la conservación de valiosas tierras forestales”, agregó Scuriatti.
El acuerdo fue suscrito con el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques (FCPF, en inglés) del Banco Mundial.
Proteger las selvas y biodiversidad del país
“Este acuerdo fortalece aún más nuestro compromiso de preservar nuestras selvas tropicales y biodiversidad, combatir el cambio climático y procurar un uso sostenible y equitativo de la tierra”, dijo el ministro guatemalteco de Ambiente y Recursos Naturales, Mario Rojas, durante la firma del acuerdo, transmitida por la televisión estatal.
El funcionario lamentó que casi el 35% de la superficie total de Guatemala está cubierta de bosques, frente al 50% en 1950, debido a la tala principalmente para uso agrícola, ganadería y asentamientos urbanos.
Los incendios forestales, las plagas y enfermedades y la tala ilegal también amenazan los bosques guatemaltecos.
Guatemala es el cuarto país de América Latina y el Caribe (después de Chile, Costa Rica y República Dominicana) y el decimoquinto a nivel mundial en firmar un pago de emisiones con el FCPF del Banco Mundial. En conjunto estos acuerdos comprometen más de 720 millones de dólares para reducir casi 145 millones de toneladas de emisiones de carbono hasta 2025, según un comunicado del organismo con sede en Washington.
Guatemala y el resto de países de Centroamérica son unos de los más vulnerables en el mundo ante los efectos del cambio climático.