Las autoridades de México rescataron el viernes a 600 migrantes que eran transportados en dos tráileres en el estado de Veracruz, en el este del país, informó este sábado el Instituto Nacional de Inmigración (INM).
PUBLICIDAD
“Son 145 mujeres y 455 hombres de 12 países”, entre los cuales de los vecinos de México, pero también de África, India y Bangladesh, dijo el INM en un comunicado.
En el grupo, “hay niños, hay niñas, hay menores, me ha tocado ver mujeres embarazadas, personas con enfermedades, gripes, tos” que ya están recibiendo atención médica, dijo a la prensa Tonatiuh Hernández, delegado de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Veracruz.
En un video de AFP, se observa el grupo en un patio de instalaciones del INM y el momento en el que un funcionario va llamando por nombre y apellido a los migrantes, que a su vez abordan autobuses escoltados por policías antimotines.
Los migrantes viajaban hacinados en los contenedores de los dos tráileres, subrayó Hernández, quien confesó que jamás había visto “tantos” migrantes “en un solo evento de este tipo”.
“Se realiza el procedimiento administrativo migratorio y se notifica a las instancias de protección a la infancia para el caso” de las familias o menores de edad que viajan solos, para su “presencia y condición de estancia” en México, añadió INM.
Procedencias
Del total, 401 (107 mujeres y 294 hombres) son originarios de Guatemala; 53 (36 hombres y 17 mujeres) de Honduras; 27 (19 hombres y 8 mujeres) de Nicaragua; ocho (cinco hombres y tres mujeres) de Cuba; 18 (cuatro mujeres y 14 hombres) de El Salvador; cuatro (una mujer y tres hombres) de Venezuela.
También fueron identificados 37 hombres originarios de Bangladesh; cuatro hombres de Ecuador; seis hombres de Ghana; un hombre de India; cinco mujeres y 35 hombres de República Dominicana, así como un hombre de Camerún, precisó el INM.
PUBLICIDAD
El rescate de los migrantes ocurre en momentos en que una caravana de unos 800 indocumentados avanza a pie por Veracruz, compuesta en su mayoría por centroamericanos, que partieron el 23 de octubre desde Tapachula, Chiapas, en la frontera con Guatemala. Hasta ahora, los indocumentados caminaron más de 500 km.
El gobierno mexicano ofrece a los inmigrantes de esa caravana residencia al menos un año por razones humanitarias, pero para conseguirla deben abandonar la columna.
Unas 1.500 personas ya accedieron, según el INM, con lo cual la caravana se redujo considerablemente desde que partió de Tapachula.
Los que permanecen en la columna se declaran escépticos ante esa oferta, pues creen que en realidad los van a deportar.
Las autoridades migratorias permiten a los migrantes caminar libremente por el país, pero no viajar en vehículos.
El flujo de indocumentados se multiplicó en coincidencia con la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca, quien prometió darles buen trato.
Más de 190.000 de ellos han sido detectados por autoridades mexicanas entre enero y septiembre, tres veces más que en 2020. Unos 74.300 han sido deportados.
Según directivas del gobierno de Biden que entrarán en vigor el 29 de noviembre, solo se deportará a inmigrantes indocumentados que representen una amenaza para Estados Unidos -como actividades terroristas o de espionaje y comisión de delitos o infracciones graves.