El exsenador Bob Dole, excombatiente de la Segunda Guerra Mundial y aspirante repetidamente desafortunado a la Casa Blanca, murió la mañana de este domingo a los 98 años, lo que levantó una ola de homenajes para esta figura emblemática de la política de Estados Unidos.
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Poco después del anuncio de su muerte por la fundación de su esposa Elizabeth Dole, el presidente Joe Biden elogió a un “estadista estadounidense como pocos en nuestra historia”, un “héroe de guerra”, pero también un “amigo” con un “sentido de la integridad y del honor infalible”.
“Estados Unidos perdió a uno de sus héroes, nuestra familia perdió a su roca”, declaró la familia Dole en un comunicado.
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En febrero, anunció que tenía cáncer de pulmón avanzado.
Tres veces aspirante a la candidatura republicana a la Casa Blanca, Dole fue vencido en las internas partidistas por Ronald Reagan en 1980, luego por George Bush en 1988, antes de ser el abanderado en 1996.
Pero el demócrata Bill Clinton derrotó fácilmente a este político, entonces de 73 años, que parecía superado por la era de la política televisada.
Veinte años antes Gerald Ford lo había elegido como su candidato a vicepresidente, pero la dupla republicana perdió ante los demócratas Jimmy Carter y Walter Mondale.
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Respeto general
El mundo político estadounidense en pleno rindió homenaje a un hombre que, según el exsecretario de Estado Mike Pompeo, “creía en la singularidad de Estados Unidos con todo su corazón”.
“Todos quienes vieron a Bob Dole en acción admiraron su carácter y su profundo patriotismo”, dijo, por su parte, el jefe de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell.
Para el expresidente Donald Trump, Dole era “un héroe de guerra americano y un verdadero patriota”, quien “sirvió al gran estado de Kansas con honor e hizo al partido republicano más fuerte”.
Mike Pence, quien fue vicepresidente durante la administración Trump, lo calificó de “un gran hombre que vivió una vida extraordinaria al servicio de Estados Unidos”.
Al otro lado del espectro político, el también exmandatario Barack Obama escribió en Twitter que se trataba de un “héroe de guerra, un líder político y un hombre de Estado”, cuya generación ponía “al país por encima del partido”.
El senador Bernie Sanders, una figura del ala más volcada a la izquierda del Partido Demócrata, saludó a un hombre que había “servido a su país con valentía en el campo de batalla y con dignidad en el Senado”.
La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, ordenó que las banderas del Capitolio ondearan a media asta en honor a este “hombre de palabra” que “personificaba el coraje y la excelencia en la función pública”.
Héroe sacrificado
Dole había nacido el 22 de julio de 1923 y creció en Russell, un pequeño pueblo de Kansas (centro).
De la Segunda Guerra Mundial regresó con medallas por su valor pero gravemente herido, por lo que debió pasar por varias operaciones en el lapso de tres años. Ello le obligó a volver a aprender a caminar para recobrar el control de su cuerpo, aunque no recuperó la movilidad de su brazo derecho.
Entonces la gente de Russell desarrolló una campaña para pagar sus operaciones médicas, en solidaridad con el joven abogado en el que se convertiría.
Ingresó a la política en 1952 y entró al Congreso en 1961, primero como diputado, luego como senador por el estado de Kansas. Cuando terminó su carrera parlamentaria, 35 años después, fungía como líder de la mayoría republicana en la Cámara Alta.
Ya retirado como legislador, Bob Dole continuó atacando a los demócratas, en particular luchando contra el emblemático plan de reforma del seguro médico del presidente Barack Obama, el Obamacare.
Estaba casado con Elizabeth Dole, que tuvo una carrera política propia, al ocupar las funciones de secretaria de Transporte y de Trabajo y senadora por Carolina del Norte. Tenía una hija de su primer matrimonio.
En el Senado, este hombre esbelto y siempre bronceado, de penetrante mirada, era conocido por su dominio de la negociación y el arte del compromiso, pero también por su humor.
Fuera de la política, no dudó en protagonizar anuncios en televisión para Pepsi y… Viagra.