El presidente Alejandro Giammattei y autoridades educativas participaron en un acto para oficializar el inicio del ciclo escolar 2022, en el tercer año de pandemia por la COVID-19.
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Los funcionarios asistieron a su vez a la inauguración de la Escuela Bicentenario en Finca La Industria, en Escuintla.
Tras una pausa de las clases presenciales, la semana pasada se decretó que en alerta roja se autorizan clases en modalidad híbrida para los colegios. Mientras tanto, las escuelas podrán hacerlo solo en alerta naranja o amarilla.
Según las autoridades de ambos ministerios, será responsabilidad de los padres de familia si envían a los estudiantes a los colegios, los cuales deberán cumplir con protocolos para protegerse de la COVID-19.
Los maestros podrán alternar la educación presencial y a distancia y deberán seguir las normas que fueron establecidas a través de un acuerdo gubernativo. Las regulaciones se deberán cumplir de acuerdo con el tablero de alertas sanitarias el cual se modificó la semana pasada.
Los estudiantes deberán permanecer en burbujas sanitarias de no más de 10 integrantes.
COVID-19 desafía regreso a clases presenciales
Guatemala retoma así las clases presenciales en medio de un debate de quienes consideran que no es oportuno ante el riesgo de contagio de los menores.
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De acuerdo a las autoridades sanitarias, el regreso a clases es necesario para la salud mental de los niños y que retomen un entorno educativo. Sostienen que los niños de igual manera se encuentran en las calles con sus familias ante la falta de restricciones de movilidad.
Pero la inquietud se mantiene en más de 8 mil escuelas públicas que no tienen las condiciones necesarias, como servicio de agua potable, daños en su infraestructura o espacio suficiente para mantener el distanciamiento.
Con relación a los niveles de vacunación, actualmente más de 600 mil menores (12 a 17 años) tienen dos dosis contra la COVID-19. La cifra supone el 28.46% de la meta total de 2.1 millones de niños y adolescentes a vacunar.
