El 3 de julio de 2022, las sonrisas de decenas de payasos se vieron apagadas en Amatitlán durante el entierro de Joselin Chacón Lobo, una joven madre que trabajaba como la payasita “Chispita”. Sin embargo, se desconocía el motivo por el cual no fue velada y sepultada junto a su esposo Nelson Estiven Villatoro Escobar, quien también trabajaba de payaso y llevaba el nombre artístico de “Charquito”.
La noche del martes, 5 de julio de 2022, en redes sociales se difundió un video de la madre de Villatoro Escobar, quien aclaró la situación y así evitar malentendidos después de una serie de acusaciones en redes sociales.
Reiteró que no es por problemas familiares ni por otras disputas familiares como se está manejando en redes sociales. Además, aclaró que su Nelson Estiven no era el padre de los hijos de Joselin; sin embargo, los quería como si lo fueran.
La desaparición y el hallazgo de la pareja de payasos
Los payasitos “Chispita” y “Charquito” estuvieron desaparecidos por 52 días. Fueron localizados sin vida el 30 de junio pasado enterrados en el asentamiento Luz de Cristo, Villa Lobos II, zona 12 de Villa Nueva. Según un informe del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, los dos fueron estrangulados. Sus cuerpos estaban enterrados en una fosa.
En el sepelio, Victoria Lobos, madre de Chacón Lobos, agradeció a quienes le acompañaban y dio gracias a Dios y a las personas que ayudaron a hallar a la joven. “Ya encontré a mi hija”, declaró entre lágrimas.
Durante 52 días, sus familiares buscaron a la pareja de payasos, quienes desaparecieron el 9 de mayo tras haber montado un espectáculo. Luego de su desaparición se realizaron varias exhumaciones en distintos puntos del país sin que se lograra ubicarlos, hasta la fecha antes mencionada los bomberos recibieron una llamada en la que se les alertaba sobre la presencia de posibles restos humanos. Fue entonces cuando los cuerpos fueron hallados.